Cerco al Milan.

, Cuando el pasado verano Fabio Capello dejó el Milan tras lograr su cuarto scudetto en cinco años, superando a la Juventus, campeón de Europa, afirmó que el título recién conquistado debía ser considerado como su empresa más difícil: "Hemos vencido a un adversario más fuerte que nosotros". Eso, el arranque de orgullo de un técnico al que el equipo no soportaba -de hecho, para forzarle a dejar el banquillo, el vicepresidente Galliani, brazo derecho de Berlusconi, condicionó la renovación de su contrato a incluir la inaceptable clausula de tener que volver a ganar el campeonato- ha resultado ser, tal y como han demostrado los hechos, un juicio inapelable. Sin Capello, sustituido por el blando Tabarez primero, y por el duro Sacchi después, el Milan se ha sumido en una crisis sin precedentes en los diez años de presidencia de Berlusconi.Cuando se ha cumplido la tercera jornada de la segunda vuelta, ya ha dicho adiós a todos los objetivos de principios de temporada: eliminado en diciembre de la Liga de Campeones, excluido de la Copa de Italia por un equipo "de provincias" como el Vicenza, y situado en la Liga no muy lejos de la zona de descenso.

Para el club, el daño económico y de imagen puede estimarse en al menos 35.000 millones de liras (unos 2.900 millones de pesetas), sin contar las consecuencias para Mediaset, el grupo televisivo de Berlusconi que tiene la exclusiva de los derechos televisivos de las retransmisiones de la Liga de Campeones. Pero el desastre a nivel técnico resulta ciertamente más profundo e inexplicable: figuras como los italianos Maldini, Albertini, Costacurta, Baresi, Baggio y Simone o como los extranjeros Weah, Savicevic, Boban y Desailly han tenido un rendimiento lamentable.

Los comentarios sobre la vida privada de los jugadores, no precisamente intachable, han obligado al propio Belusconi a intervenir, a realizar visitas cada vez más frecuentes a Milanello y a rogar al capitán Baresi, que cumplirá 37 años en mayo, que se sacrifique y siga otra temporada más. Mientras, ya ha comenzado la campaña de fichajes para la próxima temporada: llegarán Ziege del Bayern de Múnich, y Kluivert y Bogarde del Ajax. Pero sobre todo habrá bastantes bajas, empezando por Rossi, Savicevic, Costacurta, Boban y probablemente Baggio, mientras que Weah y Davids tienen muchos pretendientes.

El desmembramiento del gran Milan ha comenzado. "Sacchi predica la humildad y luego acude a los entrenamientos en un Porsche de 17 millones", ha declarado Panucci. Tras caer de la cumbre, el Milan se siente cercado.