Interior trasladará en los próximos días a cinco presos de ETA a cárceles de Burgos y Álava

El Ministerio del Interior anunció ayer que en los próximos días serán trasladados a la prisión de Nanclares de Oca (Álava) y Burgos cinco reclusos de la organización terrorista ETA, debido "exclusivamente a la evolución positiva" que se aprecia en su actitud. Éste es el tercer acercamiento de presos desde que Jaime Mayor Oreja dirige el ministerio. El primero se produjo en el mes de julio de 1996, con el traslado de 32 reclusos, y el segundo en agosto, con cuatro. Entre los cinco trasladados ahora se halla Cristina Arrizabalaga Vázquez, condenada a 16 años de cárcel por su relación con el comando Madrid, que padece trastornos psicológicos. Según Interior, no es un plan global, sino basado en "el principio de la individualización".

, Los etarras que van a ser trasladados son José Ramon Irusta Urain, que desde la cárcel de Málaga irá a la de Burgos; Ignacio Ibabe Guridi, actualmente en Orense y que pasará a Nanclares de Oca, y María Cruz Atxabal Puertas, que pasará desde Carabanchel (Madrid) a la misma prisión alavesa. Igualmente cambiarán de cárcel José Luis Sebastián Martínez, que desde Herrera de la Mancha (Ciudad Real) irá a Nanclares, y Cristina Arrizabalaga Vázquez, hasta ahora internada en Carabanchel, que también será recluida en el penal alavés.Según una escueta nota difundida ayer tarde por Interior, "esta política penitenciaria se basa fundamentalmente en el principio de la individualización de la misma, que constituye el eje fundamental de la Ley General Penitenciaria".

Entre el grupo destaca Cristina Arrizabalaga Vázquez, que fue detenida el 16 de enero de 1987 después de que los GEO asaltaran un piso de la calle del Río Ulla, donde fueron también detenidos otros cinco etarras del comando Madrid.

Arrizabalaga fue juzgada y condenada a 16 años y tres meses de reclusión por la Audiencia Nacional en septiembre de 1987, por realizar labores de infraestructura para el comando, ya que participó en el alquiler de nueve pisos, tres plazas de garaje y la compra de un chalé para el comando Madrid. La sentencia fue confirmada dos años después por el Tribunal Supremo. Ese mismo año fue trasladada a la prisión canaria de Salto del Negro.

Interior ha tenido en cuenta que Arrizabalaga lleva más de 10 años presa, ha extinguido las tres cuartas partes de la condena, participa en las actividades penitenciarias y tiene "buen comportamiento". Prisiones ha remitido informes al juzgado de Vigilancia Penitenciaria por si estima oportuno concederle anticipadamente la libertad condicional.

La condena más larga

Ignacio Ibabe Guridi, antiguo miembro del comando Gorla, es de los cinco etarras que serán trasladados sobre el que cumple una condena más larga (32 años y siete meses de reclusión). Fue detenido el 20 de febrero de 1980 en Vergara, 11 meses después de que, junto con otros etarras, intentara asesinar en un bar al industrial Luis Berasategui. El comando no logró llegar a tiempo por culpa de una manifestación, y lo mismo le ocurrió cuando lo. intentó en el centro de trabajo. Después de otros dos intentos fallidos, el grupo se enteró de que Berasategui había sido asesinado por otro comando.

Ibabe, según indicaron fuentes penitenciarias, no mantiene relaciones con los demás presos de ETA, tiene buen comportamiento y colabora como profesor de informática en el centro penitenciario de Orense.

José Ramón Irusta Urain, ex miembro del comando Andutx, que irá a la prisión de Burgos procedente de Málaga, fue detenido el 15 de enero de 1981, junto con otros tres etarras. Sobre él pesa una condena de-25 años, entre otras acciones por su relación con el asesinato, el 16 de mayo de 1980, del industrial guipuzcoano Ceferino Peña Zubía. Posteriormente, ETA dijo que se había equivocado de víctima y que en realidad pretendía matar a otro industrial.

José Luis Sebastián Martínez, que irá a Nanclares procedente de Herrera, es natural de Carrión de los Condes (Palencia), donde nació en abril de 1951. Fue detenido en Irún el 8 de marzo de 1994, acusado de pertenecer al comando de contraespionaje de ETA cuya misión era detectar los teléfonos que estaban pinchados por la policía y, además, interceptar las comunicaciones del cuartel de la Guardia Civil de Intxaurrondo y de la policía de San Sebastián.

Condenado a ocho años de prisión, Sebastián ha negado por escrito que haya sido militante o colaborador de ETA. Antes de ser juzgado en 1996, se enfrentó a un abogado que intentaba convencerle para que no se defendiera y para que no reconociera al tribunal que le juzgaba, estrategia ésta que mantienen habitualmente los reos del colectivo etarra.

María Cruz Atxabal Puertas, fue detenida por la Guardia Civil el 7 de junio de 1986, acusada " de actuar como correo de los activistas que preparaban el secuestro de un directivo de un grupo empresarial de comunicación del País Vasco. Es una presa preventiva, al no haber sido juzgada todavía, que asegura no tener relación con ETA, como apoya el hecho de que no sigue sus directrices y apenas tiene contacto con las reclusas etarras. Colabora con la asociación antidroga Bideska-Askagintza Bizcaia.