Zaplana pretende que la Generalitat valenciana controle el 30% de las cajas de la comunidad

El Gobierno valenciano, que preside Eduardo Zaplana (del PP), aplicará la potestad que tiene para reformar la vigente ley de cajas de ahorros y conseguir una representación del 30% en los consejos de administración de las cuatro cajas de la comunidad (Bancaixa, Caja de Ahorros del Mediterráneo, Caixa Ontinyent y Caixa Carlet). El proyecto ha originado una airada reacción de la oposición (PSPV-PSOE y Esquerra Unida), que ha anunciado que recurrirá la decisión si es el Ejecutivo y no el Parlamento el que designe los representantes.

, En la mayoría de las cajas ya existe participación pública, principalmente a través de los ayuntamientos, diputaciones y, en menor medida, parlamentos (casos de Castilla León, Madrid, Navarra y Cantabria). Según el anteproyecto de ley elaborado por el Gobierno de Zaplana, "la Generalitat valenciana tendrá una participación del 30%" en los órganos de gobierno de las cajas (asambleas y consejos).El texto no especifica si los representantes serán designados por el Gobierno valenciano directamente o por las Cortes. Según el Estatuto de Autonomía de la Comunidad Valenciana, se entiende por Generalitat "al presidente, el Gobierno valenciano y las Cortes". El Ejecutivo de Zaplana no ha aclarado, a preguntas de este periódico, si su intención se refiere al Gobierno, al presidente o a las Cortes.

Acusaciones

El proyecto, que debe ser aprobado por el Parlamento, ha provocado una airada reacción de los partidos de la oposición (PSPV-PSOE y Esquerra Unida). Los socialistas, autores de la vigente ley de cajas, han calificado la iniciativa de "intervencionista" y amenazan con recurrirla en el caso de que sea el Ejecutivo el que nombre los representantes porque convierte a la Generalitat "en juez y parte" de estas entidades. El PP y Unión Valenciana, aliados en el Gobierno, tienen mayoría suficiente en el Parlamento para sacar el proyecto adelante.

La polémica está servida. El Gobierno de la Generalitat quiere tener lista la reforma antes de que comiencen, en septiembre, la renovación del 50% de las asambleas y consejos de las cajas valencianas, ahora de mayoría socialista. "No concibo que se haga una ley para que estén [los socialistas] cuando mandan y también cuando no", ha dicho Eduardo Zaplana en referencia a la dificultad del PP para conseguir el control de las cajas con la vigente ley, aprobada en 1990 por la Administración socialista.

Los directivos de las cuatro cajas no se han pronunciado sobre el proyecto, que, además, contempla que los consejeros no podrán serlo más de 8 años e inhabilita a los cargos públicos -administración local, autonómica y central- a estar en el consejo. De las cuatro, Bancaixa y la CAM figuran en los puestos quinto y sexto del ranking por activos.