El motín policial en Guatemala deja al descubierto la fragilidad de la paz
, La insubordinación de un millar de agentes de la Policía Militar Ambulante (PMA), que esperan acuartelados una respuesta del Ejército a sus demandas, ha dejado al descubierto la fragilidad de la paz en Guatemala. Los policías demandan una indemnización "justa" una vez que se disuelva el batallón, compuesto por unas 4.000 personas y cuyo cuartel general ocupan desde la noche del miércoles.Según los acuerdos de paz, firmados entre el Gobierno del presidente Alvaro Arzú y la antigua guerrilla Unidad Revolucionaria Nacional Guatemalteca, la PMA debe desaparecer de forma escalonada este año. El comandante del batallón, el coronel Leonel de León Guillén, está en el acuartelamiento con los amotinados entre los que hay 24 mujeres.
Los restantes integrantes de la PMA, que se encuentran en el interior del país en cumplimiento de sus labores de vigilancia en empresas privadas u operaciones de apoyo a las fuerzas civiles de seguridad, han sido convocados para que se concentren en el cuartel.
Ningún miembro del Gobierno se ha pronunciado sobre el motín. Los insubordinados han afirmado que no depondrán su actitud hasta recibir una respuesta "satisfactoria" a sus exigencias: un promedio de 8.200 dólares (1,2 millones de pesetas) de indemnización por el tiempo que dedicaron a la institución, una demanda que analiza el ministro de la Defensa Nacional, general Julio Balconi.
La toma de la instalación, que está rodeada por un cordón de ametralladoras controladas por los atrincherados, se ha producido al mes de que el Gobierno y la guerrilla firmaran la paz, el 29 de diciembre de 1996.
Los acuerdos de paz preven, para los 46.000 militares afectados por la desmovilización, un programa de reinserción productiva, aclara el coronel Otto Noack, portavoz castrense, para quien la situación en el cuartel es "tranquila" y no hay peligro alguno.
Por otra parte, ayer se formalizó el nombramiento del general español José B. Rodríguez como responsable del grupo de observadores militares de la ONU para la verificación del Acuerdo de Paz en Guatemala.
