La Fiscalía Anticorrupción acusa a Gil de defraudar 208 millones a Marbella

La Fiscalía Anticorrupción sostiene que el Ayuntamiento de Marbella (Málaga ) ha sido víctima de un fraude de casi 208 millones de pesetas del que sería "principal autor " el alcalde de Marbella Jesús Gil,cuya empresa Club financiero Inmobiliario compró a otra , Sermosa, en octubre de 1991 y por 292 millones , unos inmuebles que rervendió al municipio apenas dos meses después por 500. Los presuntos delitos cometido por Gil son los de fraude al Ayuntamiento y a Hacienda, falsedad de documental y alzamiento de bienes.

La Fiscalía Anticorrupción ha remitido al Juzgado de Instrucción número 9 de Madrid, que investiga una querella contra Jesús Gil de los acreedores de Sermosal un escrito en el que detalla sus pesquisas sobre dos operaciones inmobiliarias denunciadas por la concejala socialista marbellí Isabel García Marcos. Según el informe, "de lo actuado se desprende la posible existencia de conductas delictivas de las que serían responsables Jesús Gil y otras personas".Siempre según la investigación de la fiscalía, en octubre de 1991, Benigno Vázquez, administrador único de Sermosa, al borde de la quiebra, vendió al Club Financiero Inmobiliario de Gil, dos inmuebles en Madrid y otros dos en Marbella, más cinco plazas de garaje, por 382 millones.

"Aprovechando la condición de funcionario público y alcalde de Jesús Gil, su capacidad de disposición del patrimonio del Ayuntamiento de Marbella, y también del patrimonio atribuido con cargo a los presupuestos a la sociedad municipal Contratas 2.000, ambos [Vázquez y Gil] se concertaron para trasladar la propiedad de parte de los inmuebles previamente transmitidos a la sociedad municipal controlada por Gil, si bien incrementando de manera no justificada su precio". El beneficio obtenido por Gil "sería sólo equiparable ( ... ) al perjuicio" causado a Marbella, se afirma.

Presunta anulación ficticia

En efecto, dos meses después, el 13 de diciembre de 1991, Vázquez y Gil escrituraban una anulación de la compraventa, que la fiscalía juzga ficticia, y realizaban una segunda opera ción por la que Vázquez vendía a Gil empresario los locales de Madrid por 90 millones y a Gil alcalde los de Marbella, a través de una sociedad municipal, por 500 frente a los 292 en que estos últimos habían sido valorados antes. Según la fiscalía, en este caso Gil no sólo participó representando a su empresa y al Ayuntamiento, sino que fue, en realidad, quien recibió "el dinero" abonado por la sociedad municipal.Para la fiscalía, "no existe circunstancia ( ... ) que justifique una diferencia de más de 207 mi llones en perjuicio de las arcas municipales". "¿Por qué, si el so breprecio era tan interesado, ,permitió Gil que la ganancia fue ra para Sermosa y no para él, que era su propietario?", se pregunta. Y se responde con dos hipótesis, ambas con responsabilidades penales. Una, que los acreedores tendrían más dificultades al pleitear contra una so ciedad municipal que contra una privada. Otra, que si la venta al Ayuntamiento la hubiese hecho formalmente la empresa de Gil se habría podido incardinar más fácilmente su conducta delictiva; de paso, evitaba tributar por la plusvalía.

Siempre según la fiscalía, además de defraudar al Ayuntamiento", hay indicios, en efecto, de fraude al fisco: la plusvalía, de casi 208 millones, habría supuesto para el Club Financiero Inmobiliario "una cuota de más de 72 millones ( ... ), que con toda probabilidad no ha sido satisfecha".

"De lo actuado", dice la fiscalía, "se desprende indiciariamente que existió un concierto previo entre Gil y Vázquez para defraudar al Ayuntamiento, obteniendo la mayor parte en dinero líquido mediante cheques bancarios al portador con cargo a la sociedad municipal para colocar en el patrimonio de ésta unas fincas cuya adquisición no parece que fuera un gran negocio a un precio escandalosamente superior al que ( ... ) les habían atribuido dos meses antes".

La fiscalía advierte: "Los locales de Madrid, todavía hoy propiedad de Club Financiero Inmobiliario, le habrían salido ( ... ) gratis a Gil porque habrían sido pagados ( ... ) con los fondos del Ayuntamiento".

Contratas 2.000, la sociedad municipal, retuvo 262 millones para pagar las hipotecas de los locales marbellíes, pero sólo abonó 35. "El Ayuntamiento ha perdido así las fincas [embargadas por ese impago] y el dinero", concluye la fiscalía.