La matanza en el hospital de la Cruz Roja en Chechenia, olvidada en la campaña electoral

Los dirigentes de Chechenia han vuelto la espalda al hospital de Nóviye Ataguí. Concentrados en las elecciones presidencialesde pasado mañana, los líderes de esta república norcaucásica, que intervienen en mítines, dan ruedas de prensa y aparecen constantemente en la televisión, se han olvidado de los pacientes y enfermeras que sequedaron en el centro médico, como náufragos a la deriva, cuando el pasado diciembre fueron asesinados cinco miembros de la Cruz Roja Internacional, entre ellos la española Fernanda Calado.

Más de una treintena de personas, entre enfermeras y personal sanitario, acuden diariamente al hospital de Nóviye Ataguí, pese a que la Cruz Roja saldó sus cuentas con ellos en diciembre y los despidió. A la entrada del establecimiento han colgado un mural con las fotos de los cinco asesinados. Los enfermos, con la excepción de media docena, se han marchado a sus casas porque el hospital no tiene medios ni dinero .para alimentarlos. Las enfermeras, chicas despiertas de este pueblo de 10.000 habitantes, atienden a quienes vienen a cambiarse los vendajes, y en las largas horas muertas tratan de imaginar cómo podrían conseguir que el hospital abriera de nuevo sus puertas bajo protección internacional."Hemos escrito cartas a los parientes de nuestros compañeros asesinados, pidiéndoles que perdonen lo ocurrido", dice una de ellas. "También hemospensado rebautizar el hospital con el nombre de Fernanda Calado, construirles un obelisco conmemorativo a las víctimas y nombrarles ciudadanos de Chechenia post mortem", afirma otra de ellas.

En Grozni, en los despachos llenos de carteles electorales, las enfermeras de Nóviye Ataguí no encontraron ayuda de ninguna clase. Finalmente, un médico ruso, de nombre Nikolái, se avino a acudir varias horas por semana al hospital a requerimiento del jefe de la administración local, Nashbudín Tadzhíkov. "Es un cirujano de campaña muy experimentado, que ha acompañado a Shamil Basáyev durante la guerra", afirma Tadzhíkov.

En el hospital, las enfermeras y los policías que las custodian (y que ahora, a diferencia de cuando ocurrió la matanza, tienen armas) creen que el doctor Nikolái ha sido enviado personalmente por Basáyev, elex guerrillero que hoy es uno de los candidatos favoritos a la presidencia de la República. Al médico no se le paga por sus servicios. "Lo único que puedo ofrecerle es ir a buscarlo en coche al pueblo donde vive y dar-le comida y cama". Sobre las pesquisas para encontrar a los asesinos de los miembros de la Cruz Roja el jefe de la administración no sabe nada. "Me han dicho que hay una pista que lleva al territorio ruso, y eso es todo. Yo, personalmente, creo que nadie se ocupa del caso", dice Tadzhíkov.

Tal vez las pistas de los asesinos de Fernanda y sus companeros sean más simples de lo que indican las declaraciones políticas. El jefe de la administración cuenta que lleva casi un año porfiando con Zaúr Muslíyev, el director del hospital del pueblo de Shalí, a una quincena de kilómetros de Nóviye Ataguí. Muslíyev era partidario de que en Nóviye Ataguí no hubiera ningún centro médico. En Nóviye Ataguí el candidato favorito a la presidencia de Chechenia es el general Aslán Masjádov, el ex jefe del Estado Mayor de las fuerzas chechenas.