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IU decide no pactar con el PSOE la moción de censura en Alcalá por la presunta corrupción del alcalde

El popular Bartolomé González seguirá siendo el alcalde de Alcalá de Henares (163.00 habitantes) hasta 1999. Los militantes de IU, reunidos en asamblea, decidieron ayer romper las negociaciones que si iniciaron el pasado 5 de diciembre con el PSOE para presenta una moción de censura. El PP gobierna en Alcalá con 11 ediles frente a los nueve del PSOE y lo siete de IU. El abandono de la conversaciones ganó por sólo 15 votos. El argumento esgrimido: no quieren arriesgarse a ser compañeros de gobierno del PSOE ahora que el ex alcalde socialista Florencio Campos está siendo investigado por su presunta participación en una red de cobro de comisiones ilegales a empresas adjudicatarias de obras.El protagonista absoluto de las cinco horas de debate fue Campos, a quien el PSOE ha sus pendido de militancia, mientras se aclara si ordenó o conocía el cobro de estas supuestas comisiones y que desde octubre no ocupa ningún cargo público.

"Si ahora nos aliamos con el PSOE, sacamos del pozo al partido y a Campos. No está claro que de haber corrupción se trate de un caso individual", manifestó un miembro del denominado sector crítico, liderado por tres ex ediles que en la anterior corporación firmaron un acuerdo de programa con el equipo de gobierno socialista. En julio de 1995 también promovieron el no al pacto. Entonces, el argumento era que Campos había incumplido el citado acuerdo.

El próximo día 21 se constituirá en el pleno una comisión municipal que investigue si hubo o no comisiones y que estará presidida por el coordinador de IU, Miguel Polo. Éste pidió a los 159 militantes que asistieron a la asamblea de ayer un aplazamiento de un mes para tomar una decisión. Según Polo, 30 días debe ser el plazo máximo en el que la comisión de investigación presente sus conclusiones. El coordinador alegó que había sido el PP el que había filtrado a la prensa los papeles que implicaban a Campos, cuando IU y el PSOE ya le habían arrebatado cinco alcaldías en la región, precisamente para frenar esta sexta moción de censura. Sin embargo, fuentes socialistas aseguran que la denuncia procedió de la militante y ex secretaria de Campos y de la ex mujer de Eulalio Ferrer Bohórquez, a través de cuya empresa, Ferrer Europa, se supone que se cobraban las comisiones.

Las conversaciones entre PSOE e IU quedaron interrumpidas el 17 de diciembre, cuando la coalición acusó a los socialistas de deslealtad por apoyar el nombramiento del gerente de un organismo de gestión cultural. Polo dijo entonces que no seguirían hablando hasta que no consultase con los militantes.

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