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La nueva Ley del Gobierno rectifica el proyecto del PP cuando era oposición

Luis R. Aizpeolea

José María Aznar ha cambiado de modo importante su idea de Ley del Gobierno respecto a cuando lideraba la oposición. El proyecto que el PP presentó en julio de 1994 otorgaba a los secretarios de Estado rango de Gobierno y no imponía la obligación de guardar secreto sobre las deliberaciones de la Comisión de Subsecretarios. Los directores de gabinete quedaban igualmente exentos de este mutismo obligatorio.

El proyecto de Ley de Gobierno presentado por el PP en el Congreso en julio de 1994, rubricado por el entonces portavoz parlamentario Rodrigo Rato, decía en su artículo 5 que el Gobierno se componía "del presidente, del vicepresidente o vicepresidentes, en su caso, de los ministros y de los secretarios de Estado"En la exposición de motivos, el legislador del PP volvía sobre el tema y reafirmaba el protagonismo de los secretarios de Estado: "Se realza la figura de las Secretarías de Estado como grandes unidades homogéneas del actuar de la Administración del Estado". La misma exposición de motivos reforzaba la figura del presidente del Gobierno, algo que sí mantiene el texto que acaba de elaborar el Ejecutivo de Aznar. "Se pretende también ordenar el frondosísimo organigrama administrativo estatal. A este efecto de realza la figura del presidente del Gobierno en consonancia con el liderazgo de¡ que le inviste la Constitución".

El nuevo texto de los populares deja fuera del Ejecutivo a los secretarios de Estado. En su título 1 y capítulo 1, que será debatido en el próximo Consejo de Ministros, señala: "El Gobierno se compone del presidente, del vicepresidente o vicepresidentes, en su caso, y de los ministros". Y añade en la exposición de motivos: "Por lo que respecta a los secretarios de Estado, se opta por potenciar su status y su ámbito funcional sin llegar a incluirlos en el Gobierno".

Las razones de este cambio son de oportunidad política. En 1994 tanto populares como socialistas -según el anteproyecto del Gobierno de Felipe González de abril de 1995- coincidían en la conveniencia de seguir el modelo francés, que eleva a los secretarios de Estado al rango. de Gobierno, para liberar de una parte de sus tareas a los ministros, como las comparecencias parlamentarias.

Aquella fórmula que defendía el PP cuando era oposición garantizaba también el interés común de socialistas y populares de separar claramente el Gobierno de la Administración con la fórmula de hacer a los secretarios de Estado miembros del Ejecutivo. A partir de ahí, la Administración propiamente dicha aparecía encabezada por los subsecretarios. Esta voluntad la recogía de la siguiente forma la exposición de motivos de la proposición de ley del PP de julio de 1994: "El texto responde igualmente al decidido propósito de profesionalizar la Administración del Estado, pues sólo así puede hacerse efectivo el principio constitucional de objetividad en el servicio de los intereses generales. A tal fin se reserva a los funcionarios de carrera de nivel superior la provisión de los puestos de subsecretarios, directores generales y gobernadores". Todo este tipo de llamamientos a la profesionalización de la Administración han desaparecido en el texto elaborado por el Gobierno de Aznar.

En cuanto a la obligación de guardar secreto, en el proyecto de julio de 1994 aparecía menos regulada. Así como en el proyecto actual figura un artículo, el 20, con el título "De la obligación de guardar secreto", en el texto de 1994 no aparecía un título específico sobre esta cuestión. El también artículo 20 de aquel proyecto, referido al funcionamiento del Consejo de Ministros, sólo señalaba en su apartado 3: "Los documentos que se presenten al Consejo hasta que éste, en su caso, los haga públicos, así como las deliberaciones que tengan lugar en su seno, tendrán carácter de reservado". Y respecto a la Comisión de Subsecretarios no aparecía ninguna referencia expresa a guardar secreto de sus deliberaciones ni tampoco se decía nada del secreto de los jefes de gabinete.

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