Los partidos no nacionalistas fuerzan al PNV a festejar el Día del Estatuto

Unidad Alavesa, el Partido Socialista de Euskadi, el Partido Popular y cuatro de los seis parlamentarios de Izquierda Unida que rompieron la disciplina de voto ganaron ayer la batalla del Estatuto de Gernika a los nacionalistas del PNV y EA. El Parlamento vasco aprobó en votación secreta la propuesta de los foralistas alaveses para que el Ejecutivo declare festivo el 25 de octubre, aniversario de la aprobación del Estatuto. El PNV recordó que la fiesta oficial es el Aberri Eguna, aunque sólo los nacionalistas lo celebran con gran despliegue.

La propuesta de Unidad Alavesa provocó una pequeña revolución en la Cámara. Las escasas seis líneas de la proposición no de ley, casi perdidas en la página 42 del orden del día del pleno, causaron la ruptura de criterios entre los partidos del Gobierno, un amago de rebelión en las filas de Izquierda Unida y, finalmente, la victoria de los partidos no nacionalistas frente a los criterios del PNV y EA. Los nacionalistas se quedaron con 27 votos frente a los 31 a favor- de los demás grupos, y dos abstenciones.

"El Parlamento vasco insta al Ejecutivo a que celebre los sucesivos aniversarios de la aprobación del Estatuto de Gernika, llegando incluso a incluir esta fecha como festiva dentro del calendario laboral del País Vasco", dice el texto aprobado.

El debate comenzó con la explicación del grupo proponente. El portavoz de Unidad Alavesa, Javier Moraza, justificó la celebración de los sucesivos aniversarios del Estatuto de Gernika "como el nexo de unión entre todas las fuerzas vascas".

El portavoz del PNV, José Antonio Rubalcaba, respaldó el voto negativo porque, dijo, ninguna Comunidad Autónoma celebra esa fecha, una postura compartida por Eusko Alkartasuna. "En estos momentos ni siquiera votaríamos a favor del texto", con los incumplimientos sucesivos y según su actual desarrollo, llegó a decir el portavoz de EA, Rafael Larreina.

Punto de encuentro

Cuando el máximo responsable de Izquierda Unida, Javier Madrazo, explicó que su grupo se iba a abstener "porque el Estatuto todavía está en fase de desarrollo", la batalla parlamentaria se dio por perdida. Y ello a pesar de que socialistas y populares anunciaron su apoyo a la nueva festividad porque el "Estatuto es el punto de encuentro de los vascosLa votación secreta cambió la cosas. Cuatro de los seis parlamentarios de Izquierda Unida se rebelaron contra su coordinador general, Javier Madrazo, y votaron a favor de la propuesta de UA, desequilibrando la votación. "No había un criterio unitario en IU", declaró Katy Gutiérrez, una de las disidentes. "No me siento desautorizado", declaró un minuto después Madrazo.