Tráfico expedienta a 16 anunciantes por exaltar la velocidad

La Dirección General de Tráfico (DGT) ha abierto 16 expedientes sancionadores contra otros tantos anunciantes por exaltar la velocidad o por incitar a conductas contrarias a las normas de tráfico. Tras cinco años en los que sólo se habían observado 25 casos de publicidad objeto de sanción -marcados por fuertes campañas propias destinadas a enfatizar los peligros de la velocidad- el hecho de que se hayan abierto 16 expedientes en seis meses es un indicio inquietante, a juicio de la Administración.De esos expedientes, 11 corresponden a anunciantes de automóviles, uno de ropa vaquera, dos de ciclomotores, uno de neumáticos y uno de bebidas refrescantes. Los anuncios implicados no se refieren sólo a publicidad directa de vehículos, sino a incitar a conductas contrarias a las normas de tráfico, como por ejemplo "ir haciendo un poco el loco en ciclomotor con las melenas al viento y las piernas colgando, aunque anuncien medias o refrescos", según María Paz López Mora, jefa del área de educación y divulgación de la DGT.

Las sanciones administrativas pueden oscilar entre las 500.000 pesetas para las infracciones leves y los 100 millones para las muy graves.

López Mora opina que se observa una "regresión" de los anunciantes. "Después de cinco años con buenos resultados hemos vuelto a todos los males, y no porque hayamos endurecido los modos de enfocarlo, sino porque han variado los modos publicitarios", afirma. Han vuelto a aparecer anuncios que directamente exaltan la velocidad, y que habían desaparecido durante algún tiempo.

La DGT no informa sobre los anunciantes afectados: sólo índica que la publicidad cuestionada se refiere a vehículos que vuelan, que despegan como aviones, en los que se oye de fondo el ruido de un vehículo de competición o la sombra de un automóvil que no puede alcanzar al propio vehículo porque éste es más veloz.

"Hay otros que son más preocupantes", explica la jefa de divulgación de la DGT. "Son los que exaltan de tal forma los elementos de seguridad de un vehículo, o el control total, que inducen al conductor a creer que será capaz de dominar, en cualquier caso, situaciones peligrosas".

Autorregulación

Vicente Dalda, consejero de la Asociación Española de Anunciantes (AEA), comentó ayer que desconocía los 16 expedientes sancionadores de la Dirección General de Tráfico y defendió la autorregulación como la mejor vía para solucionar problemas o conflictos derivados de la publicidad. "Que la Administración sea juez y parte nos parece que no es la línea que se quiere en Europa", opinó Dalda, quien añadió: "Todas las restricciones individuales de cualquier país contra la comunicación atentan contra la libertad de comercio que defiende la Comisión Europea".El consejero de la AEA entiende que estos expedientes debían haber sido remitidos a la Asociación de Autocontrol de la Publicidad, para que "internamente sean resueltos por la propia industria".