_
_
_
_

El 'airbag' ha matado ya en EE UU a 52 personas

Un niño o una mujer menuda en el asiento delantero de un automóvil, una pequeña colisión del coche y una explosión que empuja violentamente hacia atrás al pasajero. La secuencia ha costado 52 vidas en EE UU en los últimos cinco años. Ante tan alta siniestralidad, los conductores estadounidenses pueden pedir al concesionario en el que compraron su coche que les desmonte las bolsas de aire si consideran que es un mecanismo que ofrece más riesgos que ventajas. En los coches que se vendan a partir de ahora, las bolsas se inflarán más despacio y habrá advertencias sobre las medidas de seguridad que conviene adoptar.A pesar de que las bolsas de aire han salvado más de 1.600 vidas en EE UU, desde 1991 ha habido 52 muertos, la mayoría niños y mujeres, debido al despliegue violento de la bolsa. [El último caso conocido data de este mismo martes, cuando una niña de 13 meses murió decapitada al desplegarse la bolsa de aire del asiento delantero del pasajero. La niña viajaba en una silla especial de bebés y la bolsa de aire golpeó con tal fuerza su cabeza que ésta salió despedida hacia la ventanilla del coche, informa Reuter].

Tanto las autoridades como los fabricantes de coches eran conscientes de los posibles problemas desde hace 25 años, pero hasta ahora no se han tomado medidas para prevenirlos. Una investigación de General Motors fechada en 1969 indicaba que "un niño situado cerca del panel de instrumentos desde el que se despliega una bolsa de aire puede resultar gravemente herido o incluso muerto, de acuerdo con nuestras estimaciones".

Las medidas tomadas ahora responden ala ansiedad creciente de los norteamericanos ante las dos caras de la moneda de la bolsa de aire. Cada mes, un niño menor de 12 años sentado en el asiento del pasajero muere como consencuencia del impacto de una bolsa de aire que se despliega a más de 300 kilómetros por hora después de un choque del vehículo a velocidad mínima. Además de los niños, las personas mayores y las Mujeres menudas pueden sufrir también fatalmente el golpe.

En 1991, el organismo que se ocupa de la seguridad en las carreteras advirtió de los peligros de instalar sillas para bebés en los asientos delanteros de vehículos equipados con bolsas de aire, pero hasta 1995 no se dieron a conocer los datos de las víctimas.

A partir de 1999, la disminución de la velocidad de despliegue de la bolsa se unirá al desarrollo de mecanismos inteligentes que ajusten la fuerza de salida al peso y al tamaño de la persona que está en el asiento.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_