Un estudio señala que las obras de Bailén dañan el palacio de forma "asombrosa"

Las obras de la plaza de Oriente dañan el palacio Real, según dos expertos. Francisco Mingarro, catedrático de Petrología, y María Concepción López de Azcona, del Centro Superior de Investigadores Científicas, afirman que la contaminación en tomo a este edificio, desde que comenzaron las obras en 1995, "se ha elevado de una forma asombrosa", lo que ha provocado "graves enmugrecimientos, que habría que eliminar".

Los científicos, para llegar a estas conclusiones -publicadas en la revista Física y Sociedad, publicación del Colegio Oficial de Físicos-, instalaron en 1993 una estación de control en el interior del palacio. Los investigadores señalan que, desde que. comenzaron las obras, su estación ha sufrido "numerosas averías por el exceso de partículas en suspensión" y que para evitar los contaminantes gaseosos ha sido "necesario introducir prefiltros [que eviten] la obstrucción de los conductos de entrada, lo que indica la influencia de las obras públicas en el microambiente monumental".Ambos expertos recuerdan que colocaron sus medidores en la fachada del palacio para determinar "el deterioro y enmugrecimiento de los materiales pétreos" del monumento y que la estación de control municipal más cercana se halla a unos 600 metros de distancia. Mingarro y López de Azcona resaltan en su artículo "la enorme concentración de óxidos de nitrógeno", que proceden de "la quema del gasóleo y de la gran maquinaria que actúa en las obras tan próximas al palacio".

"Preocupante y demoledor"

Por su parte, la concejal socialista, Ana Tutor, calificó ayer "de preocupante y demoledor" el informe de los científicos. Según Tutor, "los análisis demuestran que el Ayuntamiento está contribuyendo con las obras a la progresiva degradación y destrucción del palacio de Oriente".La edil añade que "los camiones, la maquinaria y los atascos que se producen en la plaza de Oriente están generando tal cantidad de gases tóxicos que éstos se están infiltrando en el interior de la piedra y pueden causarle daños irreversibles". La concejal socialista opina que "el Ayuntamiento niega la evidencia de estos datos con otros que obtiene de una estación propia situada a casi un kilómetro de distancia del palacio". Y concluye: "Está claro que esos datos municipales no valen para nada".

El Ayuntamiento de Madrid, por su parte, descalificó ayer las mediciones de los científicos mencionados: "Cuando los medidores están pegados al palacio, los resultados no son fiables si de lo que se trata es de determinar la contaminación ambiental. Además, los valores de contaminación que han detectado están dentro de los que permite la directiva europea sobre este tema". Los técnicos consideran "increíble" que se diga que ha aumentado la contaminación, cuando por la plaza apenas pasan coches por las obras. "Es algo completamente ilógico", remachan.