Los peritos concluyen que en la plaza de Oriente se arrasó un conjunto monumental

Madrid - 03 nov 1996 - 00:00CET

Los cuatro expertos en historia y arqueología que, por encargo de la Fiscalía de Madrid, estudian qué destruyó el Ayuntamiento de Madrid en las obras de la plaza de Oriente han redactado ya sus conclusiones. Además de los muros de la Casa del Tesoro, cuya polémica eliminación activó la investigación del fiscal, las excavadoras se han llevado por delante vestigios de otros edificios del siglo XVI. Lo arrasado en esta plaza es un conjunto monumental del Siglo de Oro, concluye el informe de los peritos judiciales.En este escrito, según fuentes judiciales cercanas al caso, se revela que se han arrasado muchos más restos arqueológicos de importancia de que los que reconocen los responsables municipales., Tanto el alcalde, José María Alvarez del Manzano, del PP, como el concejal de Obras, Enrique Villoria, han mantenido que lo que dormía debajo de la plaza de Oriente y que ha sido destruido "no tenía ningún valor".

El objetivo de las obras es construir, por debajo de la calle de Bailén, un túnel que permita el paso franco de los peatones al Palacio Real. También se pretende excavar un aparcamiento. Álvarez del Manzano apuntó que las obras estarán terminadas "probablemente" en mayo del año que viene. El presupuesto de la reforma de la plaza de Oriente, que empezó hace dos años, es, por ahora, de 4.000 millones de pesetas, de los que 500 millones se han gastado en excavaciones arqueológicas.

"Durante mucho tiempo se han estado destruyendo allí cosas muy importantes y nadie ha dicho nada, y eso es lo que figura en el informe remitido al fiscal", afirmaron ayer a este periódico las mismas fuentes.

En el informe consta asimismo que estos edificios del siglo XVI, ahora destruidos, estaban unidos por un entramado de calles y pasadizos que también ha desaparecido para dejar paso libre al túnel.

Las excavaciones no sólo han liquidado restos del Siglo de Oro. Los peritos afirman que también han sido arrasadas varias edificaciones que el arquitecto Sabatini, el autor del Palacio de Oriente, llevó a cabo en el siglo XVIII, después de que el Alcázar de los Austrias quedara reducido a cenizas tras un incendio.

El informe de los peritos obra ahora en poder de la Fiscalía de Madrid, que se hizo cargo de este caso a finales de agosto, cuando PSOE e IU denunciaron al Ayuntamiento de Madrid por un presunto delito contra el patrimonio.

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Los peritos consideran que fue un error el traslado de los vestigios

Los cuatro expertos que han participado en la elaboración del informe establecieron por unanimidad las conclusiones finales, que afirman que lo destruido vale más de lo que dice el Ayuntamiento de Madrid. Con este dictamen en la mano, el fiscal decidirá ahora si hay motivos de delito y, por lo tanto, si sigue adelante con la acusación. Si esto es así, ya serán los jueces los que tengan la última palabra.Además de lo relativo a lo destruido, el escrito de los expertos deja claro que ha sido un error el traslado, por parte del Ayuntamiento, de las jambas y los sillares de algunas ventanas de las fachadas de la Casa del Tesoro. Los responsables municipales las desplazaron para su "conservación". Los peritos sostienen que todo esto debería haberse quedado en el sitio que ocupaban.

Informes contradictorios

La polémica sobre los restos arqueológicos de la plaza de Oriente saltó en agosto, cuando uno de los dos arqueólogos que dirigía las excavaciones, Manuel Retuerce, se opuso a la destrucción de los vestigios encontrados de la Casa del Tesoro. La otra codirectora, Ester Andreu, pensaba de manera diferente. Para el primero, lo encontrado en la plaza de Oriente constituía "un espacio evocador, casi único en la historia de Madrid". Para la segunda, bastaba con trasladar ciertos restos "de importancia" a fin de ser expuestos posteriormente en un museo.

La Comunidad de Madrid, que es quien tiene las competencias sobre el patrimonio histórico de la ciudad y quien, a la postre, tenía que dar el permiso necesario para que las obras prosiguieran, hizo caso a Andreu sin consultar a un tercer experto. El Ayuntamiento tardó dos días, con el permiso de la Consejería de Educación y Cultura en la mano, para arrasar los muros encontrados de la Casa del Tesoro.

Esto impulsó la denuncia de Izquierda Unida y del PSOE, que se presentaron, con los dos informes contradictorios, ante el fiscal.

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Sobre la firma

Antonio Jiménez Barca

Es reportero de EL PAÍS y escritor. Fue corresponsal en París, Lisboa y São Paulo. También subdirector de Fin de semana. Ha escrito dos novelas, 'Deudas pendientes' (Premio Novela Negra de Gijón), y 'La botella del náufrago', y un libro de no ficción ('Así fue la dictadura'), firmado junto a su compañero y amigo Pablo Ordaz.