_
_
_
_

Los embalses almacenan cuatro veces más agua que hace un año

El Gobierno no necesitará, de momento, destinar recursos a obras de emergencia para combatir las restricciones de agua. Los embalses de abastecimiento no sólo se recuperaron con las lluvias del pasado invierno sino que, transcurrido el verano, mantienen sus reservas en unos volúmenes cuatro veces superiores a los de hace un año; 15.238 hectómetros cúbicos frente a 4.273. El sistema metropolitano mejor dotado es el de Barcelona, con sus reservas al 80%, y el peor el del sur del Mediterráneo -Murcia-, que no alcanza el 15%.

Después de un lustro de fuertes restricciones en los riegos agrícolas y el agua de boca, el clima ha dado un vuelco a las reservas hídricas del país. En noviembre de 1995 se batían récords históricos de penuria; un año después las reservas de aguas superficiales, pese al fuerte consumo veraniego, alcanzan cuatro veces los volúmentes de 12 meses atrás.Entonces se buscaban medidas alternativas urgentes para afrontar un sexto invierno sin lluvias. Se ponía en marcha un plan de desaladoras en todo el litoral sur del país y se transportaba agua en buques cisterna a varias poblaciones costeras. Todo ha pasado al olvido. Se han levantado las restricciones y nadie se acuerda ya de la sequía.

Los principales sistemas de abastecimiento presentan curvas insólitas. El de la cabecera del Tajo -embalses de Entrepeñas y Buendía-, sin llegar a sus niveles óptimos almacena un volumen de agua cuatro veces superior al de hace un año (477 Hm3 frente a 127 Hm3). El del Segura, el doble (140 / 71).

En la cuenca del Júcar las reservas se ha multiplicado también por cuatro (234 / 53). El de Sevilla es 10 veces superior (341/32). El del Guadalquivir ocho (1745/234). Las reservas de Madrid se han más que doblado (682 / 351, un 72%) y las del área metropolitana de Barcelona se encuentra al máximo -un 80,44%,- y alcanzan la mejor dotación de España, según el boletín de información hidrológico de la última semana de octubre elaborado por el Ministerio de Medio Ambiente.

Este panorama de abundancia ha desactivado la tensión política derivada de la sequía y otorga al Gobierno un periodo de gracia para formular sus ideas en este campo. El Plan Hidrológico se aparca durante un año más, en tanto la Secretaría de Estado de Aguas y Costas prepara la modificación del Reglamento del dominio público hidráulico y está a la espera de desarrollar la posibilidad de que las Confederaciones Hidrográficas constituyan sociedades mercantiles para la gestión de los recursos hídricos.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
SIGUE LEYENDO

Descenso de los pozos

La espera de un año más en la definición de la política hidráulica en una temporada de abundancia global puede perjudicar, no obstante, al sureste de la Península, donde la escasez es crónica.

Las reservas de los embalses de donde se nutre el trasvase Tajo-Segura (Entrepeñas y Buendía) no alcanzan el 20% de su capacidad. De ellos se abastecen dos millones de residentes en Alicante, Murcia y Almería y una parte de los riegos agrícolas de estas zonas. El sistema de embalses del Segura se encuentra al 14%; el de Alarcón-Contreras, al 11l%; el de Mijares al 14% y el del Turia al 19%.

Por añadidura los acuíferos de esta zona, sobreexplotados en su mayoría, no se recuperan. Según los últimos datos, los niveles de los pozos de referencia continúan bajando: 10 metros en Hellín (Albacete), de 190 a 196 metros en el valle del Guadalentín (Murcia) y el descenso de los acüíferos en la zona del Algar (Alicante) alcanza los 90 metros (de 150 a 240) en un periodo tan corto como el comprendido entre mayo de 1995 y el pasado mes de septiembre.

Un poco más abajo, ya en territorio almeriense, el nivel de recursos mantiene su línea descendente. El embalse de Cuevas del Almanzora, que abastece a toda el área de Mojácar y Vera, este año sólo almacena un tercio de su capacidad (56 Hm3 de 168). El debilitamiento de estas reservas amenaza la calidad del agua, porque cada vez resulta más difícil diluir los vertidos contaminantes procedentes de la manipulación del mármol en las canteras de Macael.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_