El nuevo primer ministro noruego reajusta el equipo de gobierno

No hubo sorpresas cuando se hicieron públicos ayer los nombres del nuevo equipo ministerial que bajo la direccion de Thorbjörn Jagland, acompañará a éste hasta las próximas elecciones previstas para el mes de septiembre. Entre los nuevos nombramientos, uno de los más llamativos fue el de la popular escritora de novelas policiacas Anne Holt, menos conocida como experta jurista, que ocupará el Ministerio de Justicia. Holt se ha destacado como abogada de refugiados y ha defendido una política humana y solidaria con los inmigrantes. Desaparece del Gobierno, en cambio, otra figura femenina, también popular, proveniente de los medios artísticos, la cantante y ex presentadora de televisión Asa Kleveland, que desde 1990 había desempeñado la cartera de Cultura. Björne Tore Godal, en el Ministerio de Asuntos Exteriores; Jens Stoltenberg, que de Industria pasa a Finanzas, y la designación de Terje Röd Larsen como ministro de Planificación, son las novedades más destacables del nuevo equipo. En total, siete ministros del equipo anterior cesan en el Gobierno actual.

La transición se ha producido con toda normalidad cuando el país disfruta de una economía floreciente cuya mayor preocupacion consiste en que la abundancia no produzca un recalentamiento que disparete inflación y las tasas de intereses. Una triste experiencia que ya conocieron los noruegos anteriormente.

"Como Gro, ninguno"

El gran desafío para Jagland es estar a la altura de su antecesora. La situación a este respecto podría resumirse en las palabras de una anciana respondiendo a una encuesta callejera de la televisión: "Como Gro, nadie, pero esté chico nuevo [aludiendo a Jagland] es bueno también". Ésta es la opinión del 58% dé los noruegos según el resultado de un sondeo efectuado el mismo día en que Gro Harlem anunciara su renuncia.De origen humilde, procedente de una familia de trabajadores, Jagland es un típico representante del estilo socialdemócrata nórdico, vinculado a la Central de Trabajadores y al movimiento popular. No tiene una gran experiencia de gobierno ni una oratoria capaz de entusiasmar a las multitudes, pero se le considera eficaz en el contacto directo con la gente. En medios políticos se comenta que Jagland no era el candidato preferido por Gro Harlem Bruntland para sucederle en la jefatura del partido, sino el también joven ministro de Industria, Jens Stoltenberg. Pero lo cierto es que, una vez decidida su elección en el congreso del partido en 1992 Gro Harlem respaldó a Jagland, de forma total.

En sus primeras declaraciones, el nuevo primer ministro afirmó que no habrá ningún cambio radical ni un giro a la izquierda. Opositor hace años a la Comunidad Europea, poco a poco fue cambiando de posición y se volvió un ferviente partidario de la Unión Europea.