El presidente de Navarra anuncia la retirada del acuerdo de cooperación vasco-navarro

El presidente del Gobierno navarro, Miguel Sanz, de Unión del Pueblo Navarro (UPN), anunciará mañana en Madrid a José María Aznar que su Gabinete ha decidido retirar el acuerdo de cooperación suscrito con el País Vasco de su actual trámite parlamentario en las Cortes. La decisión de renunciar a este órgano de cooperación interregional, aprobado por los Gobiernos y los parlamentos de Navarra y Euskadi, la adoptarán los socios navarros del PP el lunes. El portavoz del PNV en el Senado, Joseba Zubía, y del Grupo Socialista, Juan José Laborda, dudaron de la capacidad legal del Gobierno navarro para retirar el acuerdo, por haber sido "firmado por dos parlamentos, el vasco y el navarro".

Miguel Sanz adelantó ayer sus intenciones en unas declaraciones a Radio Nacional. "No voy a hablar de este tema con Aznar desde el punto de vista de requerirle una opinión. Éste es un tema que afecta única y exclusivamente a Navarra, y que afecta también a la comunidad autónoma vasca", señaló Sanz. "En cualquier caso, puedo comentarle la decisión que, previsiblemente, va a adoptar el Gobierno de Navarra el próximo lunes", añadió. Sanz insistió en que será una comunicación y no una consulta".El portavoz del PNV en el Senado, Joseba Zubía, opina que "es inaceptable" la decisión del presidente navarro y "una rabieta sin posibilidades legales". Miguel Sanz, de UPN, fue nombrado presidente de Navarra hace un mes, y desde el principio dejó clara su posición contraria al acuerdo parlamentario vasco-navarro, suscrito por la mayoría anterior: PSOE, Convergencia Democrática de Navarra y Eusko Alkartasuna.

Sanz y su partido, UPN, creen que el acuerdo parlamentario vasco-navarro es una maniobra de Euskadi para absorber a Navarra. Fuentes nacionalistas vascas creen que la decisión de Sanz se ha basado en la publicación de un tríptico publicitario del Gobierno vasco, sobre albergues en el que aparecen incluidos los de Navarra y el País Vasco francés.

El portavoz socialista del Senado, Juan José Laborda, cuestiona también las posibilidades legales del Gobierno de Navarra para retirar el acuerdo parlamentario. "Primero tendría que pronunciarse el Parlamento Navarro, donde UPN no dispone de mayoría", dijo ayer Laborda. "Lo que ha pasado me parece la quintaesencia de la actitud del PP. Han estado diciendo cosas que no pueden sostener. La posición del Gobierno de Navarra, de UPN, sólo se entiende desde su discurso radical", añadió.

Tanto los portavoces del PNV como del PSOE creen que para invalidar el acuerdo tendrían que pronunciarse ambos parlamentos. También opinan que lo que sí puede suceder es que el Grupo Parlamentario Popular, que cuenta con mayoría en el Senado, lo bloquee en su tramitación parlamentaria si se pliega a la decisión de sus socios navarros de UPN. La decisión la adoptarán en el encuentro que hoy mantendrán en Navarra el portavoz del PP en el Senado, Pío Garcia Escudero, y los socios navarros de UPN; y en la posterior reunión que mantendrán el presidente navarro Miguel Sanz con el jefe del Gobierno, José María Aznar.

Los estudios de la ponencia técnica conjunta creada por el actual Gobierno vasco y el anterior Gobierno navarro, que presidía el socialista Javier Otano, condujeron a la firma de un protocolo el 25 de octubre de 1995 en Vitoria por parte de Otano y el lehendakari José Antonio Ardanza. El pasado 14 de mayo, ambos gobiernos aprobaron el texto del acuerdo de colaboración, que fue después refrendado por los parlamentos vasco y navarro. Tras el estallido del escándalo de la cuenta suiza de Otano y la sustitución del Gobierno tripartito navarro por otro perteneciente a UPN, el acuerdo quedó cuestionado, ya que los regionalistas pretendían modificar por completo el espíritu y la letra del mismo.

El PP ha pretendido también introducir determinadas modificaciones en el acuerdo para dar vía libre a su trámite en el Senado. El PNV, a través de su portavoz adjunto Xabier Albistur, amenazó con su retirada de la ponencia de reforma de la Cámara alta si el acuerdo quedaba descafeinado.