Hacienda subirá un 14% el impuesto de actividades económicas de bancos y cajas

Hacienda, la Federación de Municipios y las entidades financieras han llegado a un acuerdo por el cual éstas pagarán un 1.4% más por el Impuesto sobre Actividades Económicas (IAE) que se aplica a las sucursales de bancos y cajas de ahorros. Estas entidades obtienen, a cambio, una clarificación de los conceptos por los cuales se les cobrará este impuesto, lo cual lleva implícito el fin de los múltiples pleitos emprendidos por los municipios como consecuencia de la anterior ambigüedad de los límites de aplicación del IAE. Esta clarificación puede, a la larga, suponerles también un importante beneficio económico. Otro de los cambios consiste en que la obra social de las cajas queda exenta del IAE.

El artículo 61 del proyecto de ley de Presupuestos pone negro sobre blanco la solución a un problema que enfrenta a municipios y entidades financieras desde hace varios años: la aplicación del IAE a las sucursales de bancos y cajas de ahorro.La disputa, que en muchos casos ha llegado a los tribunales, estribaba en sobre qué conceptos o actividades aplicar el impuesto. Los municipios defendían que si una sucursal realizaba varios negocios (captación de depósitos, arrendamientos financieros, asesoramientos a empresas), debía pagar por cada uno de ellos, independientemente. Las entidades financieras, por contra, esgrimían que sólo estaban obligadas a hacerlo por su actividad principal, ya que las restantes eran simples desarrollos de ella.

Precedete en Cataluña

A la vista de que los pleitos cada vez eran más numerosos -el Ayuntamiento de Valladolid, por ejemplo, fue uno de los activos en esta práctica-, los representantes de la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP), de la Asociación Española de la Banca Privada (AEB) y de la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) comenzaron a negociar una salida, siempre contando con el visto bueno del Ministerio de Economía y Hacienda. Además, tenían un precedente: el acuerdo suscrito entre la Federación Catalana de Municipios y la Federación de Cajas de Ahorros de esa comunidad.Después de varias rondas de contactos, se alcanzó el siguiente acuerdo, idéntico al suscrito en Cataluña: la tarifa general de este tributo se incrementaba un 14% -con cinco escalones en función de la población-, pero a cambio se unificaban en ella todas las actividades que realizan las entidades financieras. En concreto, las nuevas tarifas son las siguientes:

En poblaciones de más de 500.000 habitantes: 347.758 pesetas.

En poblaciones de entre 100.000 y 500.000 habitantes: 269.584 pesetas.

En poblaciones de entre 40.000 y 100.000 habitantes: 191.286 pesetas.

En poblaciones de 10.000 a 40.000 habitantes: 74.334 pesetas.

En las poblaciones restantes: 52.034 pesetas.

Fuentes de la FEMP sostienen que con esta modificación se asegura un aumento de la recaudación, que quedaría en el aire en caso de entrar en una cadena de pleitos. Por su parte, las cajas y los bancos destacan que los cambios "nos permiten contar con una partida clara de gastos, no sujeta a imprevistos". Expertos fiscales y financieros señalan que "a la larga, esta reforma puede conllevar beneficios económicos directos, y no sólo indirectos o jurídicos, a la banca".

El artículo 61 del proyecto de ley de Presupuestos contiene, en su último párrafo, otro retoque en la aplicación del IAE, muy importante para las cajas de ahorro: la exención del impuesto "para las actividades propias de su obras [de las cajas] benéfico-social". Las 50 cajas españolas destinaron unos 80.000 millones de pesetas a la obra social durante el año pasado.