Clinton logra limar la ley de inmigración con los dirigentes del Congreso
Con los acuerdos entre la Casa Blanca y los dirigentes del Congreso sobre Inmigración y Presupuestos, el presidente Bill linton se apuntó ayer dos tantos que llegan en un momento muy oportuno para su campaña electoral y que también son muy útiles para las aspiraciones de los congresistas republicanos que deben revaldar su escaño el 5 de noviembre. Los dirigentes republicanos accedieron ayer a eliminar de la Ley de Inmigración las provisiones más polémicas ante la amenaza de veto de la Casa Blanca, igual que ocurrió con la segregación del capítulo que prohibe el acceso de los hijos de los inmigrantes iegales a la enseñanza pública.Si no se hubieran eliminado esas provisiones, los emigrantes legales correrían el riesgo de deportación en caso de ser beneficiarios de programas de ayuda en el comienzo de su estancia en EE UU. Se suavizan también los requisitos económicos para que los emigrantes legales puedan financiar la entrada de familiares en EE UU y queda anulada la prohibición de que los emigrantes con sida, legales o ilegales, reciban tratamiento, como estipulaba la ley.
En opinión de Clinton, la nueva ley servirá para luchar contra la inmigración ilegal "sin dañar a niños inocentes y sin perjudicar a los emigrantes legales". El presidente de la Cámara, Newt Gingrich, reconoció que habían cedido en ciertos aspectos "con el fin de conseguir el conjunto de la ley". Pero el tercero en discordia, el candidato Bob Dole, queda descolocado, alentando las sospechas que indican que numerosos congresistas de su partido prefieren confirmar su puesto en las Cámaras antes de apostar por una candidatura en cuyo éxito no confían.En la larga madrugada de negociaciones, la Casa Blanca y los líderes republicanos del Congreso acordaron también un presupuesto para 1997 que contempla gastos por valor de 450.000 millones de dólares. El presupuesto podrá entrar en vigor justo a tiempo, el próximo 1 de octubre, cuando comienza el año fiscal norteamericano, si para entonces las dos Cámaras han dado Su visto bueno.
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