RTVE perderá 120.000 millones tras pedir al Estado otros 157.000

Mónica Ridruejo, que denunció "gravisimas irregularidades" de su antecesor por una supuesta desviación de 8.000 millones de pesetas en las cuentas, va a pedir hoy el respaldo del Consejo de RTVE a un presupuesto para 1997 en que se prevén 20.000 millones más de pérdidas que en el año actual, y en el que aparece una deuda adicional de 40.000 millones sobre la proyectada para el presente ejercicio. Una descripción de tintes dramáticos enmarca la petición de 157.432 millones de pesetas al Estado para 1997 y el cálculo de que, aun asi, habrá un déficit de 120.000 millones que alguien habrá de financiar.

De todo el dinero que Ridruejo pide a los contribuyentes, la cantidad más fuerte (132.081 millones) es para asumir el 50% de la deuda histórica pendiente. Sumado a la subvención completa de Radio Nacional que también solicita, arroja un total de 157.432 millones que hay que extraer de la bolsa común para que sea posible mantener la radiotelevisión estatal un año más. Y todo ello para malvivir, puesto que se prevé un déficit récord (los ya mencionados 120.000 millones como resultado del ejercicio).Otro problema es que el documento de los presupuestos cifra el endeudamiento total de RTVE para finales de este año en 264.163 millones de pesetas, lo cual rebasa en más de 40.000 millones lo que había previsto el anterior equipo directivo de Jordi García Candau. Ridruejo ha obtenido autorizaciones para nuevos endeudamientos por parte del Gobierno del PP.

Los autores del documento de los presupuestos echan una buena bronca a las Cortes: les culpan de no haber implantado "un mecanismo de financiación pública estable" y les avisan de que, si no asumen el trozo de deuda solicitado, ésta crecerá el año que viene hasta los 425.000 millones.

Al margen del problema de la deuda, la dirección de RTVE dice que necesita 209.909 millones en total para funcionar durante el próximo año. Todavía más complicado: prevén menos ingresos, aunque conciben mayores gastos. Con los ingresos propios de RTVE sólo se puede cubrir el 31% del presupuesto de gastos, porcentaje que sube al 42% si a esos ingresos se añade la subvención estatal solicitada.

La razón de gastar más queda bastante confusa. Hay un incremento importante en el capítulo de "compras" y otro en costes de personal, pese a tratarse de un año en que los funcionarios públicos van a ver congeladas sus retribuciones; y el personal de RTVE, en ese aspecto, se rige por reglas equivalentes a las que afectan a la función pública.

He aquí algunas de las causas alegadas en el documento:

Menos publicidad. El ente va a ingresar menos dinero por publicidad porque RTVE va de buena. Tiene que introducir contenidos de carácter público que interesan poco a la audiencia; no puede ofrecer tarifas más competitivas, ni meter tantos anuncios como las privadas; y por reproducir sus palabras, no puede utilizar "diferentes técnicas y fórmulas publicitarias como la teletienda o la publicidad solapada". El anteproyecto de presupuestos valora en 8.000 millones de pesetas lo que RTVE deja de ingresar por no utilizar esas malas artes; y menciona otros 8.000 o 9.000 millones más que dejará de cobrar por perder el próximo año en torno a cuatro puntos de audiencia media porcentual, caída que tampoco se entiende, ni justifica, por qué ha de producirse inexorablemente. La dirección de RTVE se siente condicionada por la obligación de emitir "una programación variada y equilibrada con criterios de servicio público", afirmación que, sin duda, no comparten muchos seguidores de la televisión.

Cargas públicas. RTVE valora en 52.026 millones de pesetas el importe de sus esfuerzos por ofrecer servicios de "marcado carácter público". La partida más importante se refiere a Radio Nacional de España, para la que se pide subvención al ciento por ciento: 25.351 millones de pesetas. Esa subvención a RNE por su "marcado carácter público" coincide con la puesta en práctica de una programación que pretende competir de lleno con las emisoras privadas, como han destacado sus principales responsables.

Las otras cargas enumeradas como de "carácter público" son: el coste de los centros territoriales de TVE, la gestión de los canales de TVE por satélite, la Orquesta y Coro de RTVE, el Instituto Oficial de RTVE, los Programas Institucionales de TVE [cobertura de actividades de la familia real, retransmisiones parlamentarias, elecciones y otras] y participación en diferentes organismos.

Plantilla. Los autores del documento han soslayado todo lo que pueda inquietar a los trabajadores de RTVE. Aún así, dicen que el año próximo volverán a producirse necesidades de financiación "adicional", no cuantificadas, que dependerán de estudios sobre "estructura y volumen de la plantilla", entre otros.

Televisión de pago. En el presupuesto de inversiones aparece una cantidad de 17.745 millones como participación de RTVE en la sociedad holding de televisión digital, esto es, en la empresa que RTVE pretende formar con otros aliados para crear una televisión de pago. No se prevé empezar a recuperar esas inversiones antes de cinco o seis años.