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Rojo: "Hay que apostar por la educación y la investigación para superar el ajuste"

Javier Sampedro

El gobernador del Banco de España, Luis Ángel Rojo, recordó ayer una vez más la imposibilidad de mantener "los pesados sistemas de bienestar social" característicos de los países europeos, pero advirtió que la necesaria etapa de ajustes será muy larga y afectará con mayor crudeza a los trabajadores con menor educación y cualificación. Concluyó, por ello, que las economías deben apostar por la investigación, la educación y la adaptación profesional para minimizar los costes sociales del ajuste.

Rojo, que clausuró los cursos de verano de la Universidad Internacional Menéndez Pelayo de Santander con una conferencia sobre La economía mundial en el fin de siglo, insistió en que la reducción de los déficit públicos es una necesidad "inaplazable", pero recalcó que "los ajustes pueden afectar gravemente a importantes grupos sociales" y que "las sociedades avanzadas han de poner límites al infortunio y han de evitar las, escisiones sociales derivadas de la mala distribución de la renta".Tras una detallada revisión de las causas del alto índice de desempleo de los países europeos, el gobernador del Banco de España descartó que la apertura del comercio con los países en desarrollo fuera el factor más determinante, y apuntó en su lugar al rápido avance tecnológico como principal causa del paro, debido al desajuste entre las nuevas técnicas y la capacitación profesional de los trabajadores.

Rojo sumó su voz a quienes reclaman más inversiones orientadas a mejorar la "creación y difusión del conocimiento", apoyar la investigación, atender la educación temprana y la formación de adultos y ayudar a "la reconversión profesional de los atrapados por el paro y la pobreza".Mercado de trabajo flexible

"Es importante", dijo el gobernador, "que los Gobiernos faciliten las posibilidades de desarrollo de los nuevos bienes y servicios basados en el avance tecnológico, cuyos mercados potenciales se ven sometidos a restricciones que frenan las oportunidades de inversión y de creación de empleo". Para que las nuevas tecnologías se traduzcan en creación de empleo también es necesaria, según Rojo, una mayor flexibilización del mercado de trabajo.El gobernador recordó que los Estados Unidos han logrado mantener una modesta tasa de paro gracias a la debilidad de la negociación colectiva, la parquedad del salario mínimo y las escaseces de los sistemas de protección por desempleo y de seguridad social.

Rojo señaló, sin embargo, que, aunque ese sistema estadounidense de "libre competencia" laboral ha creado mucho empleo en tiempos de rápida evolución, tecnológica, también ha provocado un "notable empeoramiento en la distribución de la renta" y un "serio deterioro de las condiciones de vida de los trabajadores más modestos".

"El avance tecnológico y la globalización creciente de los mercados", concluyó el gobernador del Banco de España, " son fenómenos centrales de la economía mundial de este fin de siglo, y sería un grave error tratarlos como pasajeros y susceptibles de control".

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