El destino del oro nazi
El informe del Ministerio de Asuntos Exteriores británico sobre el destino del oro saqueado por los nazis no nos muestra nada más que la punta de un iceberg sumamente repugnante. Pero contiene las pruebas suficientes como para defender una investigación más profunda. El informe confirma las sospechas de que, después de la guerra, los aliados no fueron muy diligentes presionando al Gobierno suizo para que devolviera el oro ilegalmente adquirido y enviado a ese país por los nazis. ( ... ) Las evidencias iniciales sugerirían que la mayor parte del oro del que se apropiaron los nazis está todavía por descubrir en lo esencial, porque ningún Gobierno ha hecho excesivos esfuerzos por encontrarlo. ( ... ) Tan pronto como finalizó la guerra, y la cuestión del oro robado se hizo más moral que estratégica, se atenuó la presión diplomática. Ningún país sale bien parado de esta historia. Todos los Gobiernos implicados recibirán presiones para abrir más archivos y ver si puede compensarse de algún modo a los agraviados o a sus herederos. Aunque es tarde para la mayoría de las víctimas, no lo es para reconocer que el oro robado es una cuestión moral, no un problema de oportunidad diplomática o sutilezas legales. El Reino Unido ha dado un primer paso al revelar un episodio sórdido. Suiza y sus bancos deben actuar ahora rápidamente para cumplir su promesa de cooperar con el equipo internacional de investigadores que busca el oro robado 11 de septiembre
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