Aznar impone a Exteriores el cambio de embajador en Cuba

El Gobierno de José María Aznar quiere hacer ostensible un gesto de endurecimiento de su política frente al régimen cubano de Fidel Castro. Para ello, José Coderch, fontanero en Moncloa del ex presidente del Gobierno Adolfo Suárez y actual director de la Escuela Diplomática, será designado embajador en La Habana y sustituirá a Eudaldo Mirapeix, nombrado tan sólo hace 15 meses. El nombramiento de Coderch ha sido impuesto por el presidente Aznar, en contra de los deseos del ministro de Exteriores, Abel Matutes, que había decidido mantener al embajador actual.

El Gobierno cubano, como cree Presidencia del Gobierno, tardará más de lo habitual en conceder el plácet al nuevo embajador español, como forma de mostrar su disgusto por lo que entienden como relevo precipitado.Matutes comunicó a Mirapeix, a finales de la primavera pasada, que quería seguir contando con él en ese destino, aunque responsables del nuevo equipo de Exteriores le reprochan al embajador saliente su prudencia en las relaciones con la disidencia y al trasladar las protestas al régimen por su trato a la 'oposición. En mayo, tras constituirse el nuevo Gobierno, se anunció la supresión de la cooperación con Cuba que no fuese humanitaria, aunque luego se matizó que no se interrumpiría la que pudiese beneficiar al pueblo cubano.Coderch, de 49 años, ingresó en la carrera diplomática en 1974 y, además de colaborar con Suárez en La Moncloa, fue gobernador civil de Barcelona en 1980.

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