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PATRIMONIO

Más millones para un mecano de andamios en una joya de templo

Hace ya algo más de 20 años que la historia no cambia en la basílica de San Francisco el Grande: de cuando en cuando, una promesa de dinero y la esperanza de dar un nuevo impulso a las obras de rehabilitación de este templo, que comenzaron en 1974. Fue entonces cuando se instaló la gran maraña de andamios que recorre todos los rincones de su interior. El último pasito para continuar con las obras de este templo se dio ayer: el Ministerio de Cultura aporta 42 millones.Las obras de San Francisco el Grande comenzaron el 6 de agosto de 1974. Cincuenta metros cuadrados de andamios cubren desde entonces el templo de la calle de Bailén, que desde finales del siglo XVIII ha sido escenario de importantes bodas y funerales. Su fachada se terminó de arreglar en 1990, cuando se anunció que el interior se remataría en 1992.

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Falta de acuerdo

El Ministerio de Cultura aporta 42 millones a la basílica de San Francisco el Grande

Este dinero estaba destinado a reparar la cúpula central, las pinturas, la linterna, el presbiterio y el convento situado junto a la basílica. El pasado mes de diciembre se tuvieron que conceder dos años más de plazo a ese convenio por falta de acuerdo entre el Ministerio de Cultura y la Obra Pía.El templo de San Francisco el Grande se convirtió en basílica en 1963. Y fue declarada monumento nacional en 1980. Los funerales por Alfonso XII o el tedéum por Alfonso XIII son agunos de los acontecimientos que han vivido sus muros.

Entre sus joyas cuenta con un retablo pintado por Goya y una sillería del siglo XVI que procede del monasterio de Santa María del Paular.

Todos los tesoros que guarda esta iglesia neoclásica de finales del siglo XVIIl y sus seis capillas sé esconden detrás del inmenso mecano de andamios, con el que poco a, poco se han acostumbrado a convivir los fieles que aún acuden a oír misa.

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