Perfil bajo de Ziugánov en los últimos días antes de las elecciones

"Hay que dar tiempo a la gente para que pueda pensar, para que se tranquilice. ¿Para qué incendiar los ánimos hasta el último minuto, cuando ya sin ello nuestra sociedad está dividida?"', dijo el líder comunista, Guennadi Ziugánov, a VIadímir Perfiliev, su secretario de prensa como explicación de la táctica de fin de campaña adoptada por su partido. Ziugánov optó por una estrategia opuesta a la de su principal rival y actual presidente, Borís Yeltsin, y en los dos últimos días anteriores a lajomada de reflexión se abstuvo de realizar actos públicos.Ayer Ziugánov lo pasó en Moscú "en reuniones organizativas con los dirigentes de los movimientos que integran el Bloque de Fuerzas Patrióticas", y el jueves se limitó a dar una conferencia de prensa. Pero la fortuna ha sonreído a los comunistas, ya que ayer, fueron los últimos en intervenir por televisión en los espacios gratuitos que la ley rusa otorga a los candidatos.

Los últimos cinco minutos de intervención gratuita por el primer canal de la televisión rusa -que de acuerdo con el sorteo realizado a comienzos de la campaña electoral, correspondieron a los comunistas- los hizo a favor de Ziugánov el conocido cineasta Stanislav Govorujin. Este canal se ve en toda Rusia y en varios países de la antigua URSS, y Govorujin es una de las personas más populares y respetadas del país. El que se encomendase al director de los filmes documentales de denuncia Así no se puede vivir, La Rusia que perdimos y La gran revolución criminal, amén de una serie de famosas películas de argumento, no es casual. Govorujin nunca fue un comunista -los dos primeros documentales citados son claramente antisoviéticos y contribuyeron a la victoria de Yeltsin en 1990-, sino que pertenece al grupo de intelectuales nacionalistas que han dado la espalda al actual presidente al que acusan de aplicar una política prooccidental.

Respeto a la propiedad

La última oportunidad de dirigirse a los electores por la televisión de San Petersburgo, que también se ve en Moscú y otra ciudades, la aprovecharon par mostrar a Ziugánov respondiendo a las preguntas más frecuentes de sus electores.Por supuesto, el líder comunista aseguró una vez más que respeta todas las formas de pro piedad, incluida la privada, que si gana las elecciones bajo o su Gobierno no habrá represión política, que incentivará el desarrollo de la industria nacional y que protegerá la ciencia y la educación.

Ziugánov respondió ayer a la carta abierta de banqueros y empresarios, que critica su programa económico, y llamó a todo los candidatos presidenciales unir fuerzas para "asegurar el orden y el cumplimiento de la le durante las elecciones, así como el control de la votación y del recuento".