El edil de Hacienda destituye a la gerente de ERESA tras descubrir el robo de un empleado

El robo de 51 millones por parte del jefe de administración de la empresa municipal de Recaudación Ejecutiva (ERESA) se ha cobrado su primera víctima política. Pedro Bujidos, concejal de Hacienda, del PP, anunció ayer la destitución de la gerente de la empresa, Juana Morcillo. El concejal socialista Enrique Tierno alertó sobre la posibilidad de que el relevo en la cúpula de ERESA sea la antesala de la privatización de la empresa. Tanto compañeros de trabajo como fuentes de la oposición calificaron ayer a Juana Morcillo como una "funcionaria rigurosa", a la que Bujidos "tenía hace tiempo enfilada" al considerarla poco afín a la gestión municipal del PP y contraria a la privatización.

El robo del dinero, junto con los rumores sobre el cese de Juana Morcillo, acapararon en la mañana de ayer la atención de los funcionarios municipales en la Plaza de la Villa. Pocos dudaban que Bujidos "dejara pasar la oportunidad de cesar a la gerente de ERESA". Las quinielas más benévolas le daban un "99,99% de posibilidades de perder su puesto". Finalmente, el rumor cobró cuerpo a primera hora de la tarde.Enrique Tierno, portavoz socialista en la comisión de Hacienda, la definió como una "funcionaria rigurosa" y situó la sustracción realizada por un empleado dé la empresa en el contexto de situaciones que habitualmente "se dan en los bancos, donde se sabe que siempre hay el riesgo de que en alguna sucursal desaparezca dinero".

Tierno señaló que el dinero sustraído corresponde "a los gastos de explotación de la empresa, porque a las grandes cuentas bancarias [donde se deposita el dinero cobrado a los morosos] el acceso es muy restringido". Las órdenes para estos pagos debían llevar dos firmas; la de Arias Jiménez y la de Morcillo. El empleado utilizó para el robo talones que -en teoría- debía cobrar Correos, pero que hizo efectivos él, ya que ERESA figuraba en el págase a.

Tierno también repochó al concejal de Hacienda que "la oposición se ha enterado del robo por los medios de comunicación, cuando él [en referencia a Bujidos] lo sabía desde la semana pasada".

Pedro Bujidos, por su parte, justificó el cese de Juana Morcillo en la convicción de que "hubo cierta negligencia en las actuaciones sobre este caso, por lo que se adoptarán las medidas oportunas para garantizar que el área de Hacienda esté en manos responsables". Bujidos descartó, no obstante, que a Morcillo se le puedan imputar responsabilidades penales. "Sólo hay cierta negligencia, ya que no prestó la debida atención a su trabajo", reiteró.

Rentable

Desde la oposición existe la convicción de que Juana Morcillo será sustituida por una persona proclive a la privatización de la empresa. "ERESA es muy rentable y se puede entrar en una dinámica de mala administración para argumentar después que es mejor privatizarla". "Actualmente con cada peseta de inversión que mete el Ayuntamiento en ERESA, se ganan ocho", afirma Enrique Tierno. Bujidos puntualizó, por su parte, que "este caso no tiene porque agilizar los estudios que se están haciendo para la futura privatización".Horas antes de que Bujidos anunciase el cese de Juana Morcillo, el alcalde de Madrid, José María Álvarez del Manzano, restó importancia a la sustracción de los 51 millones por parte Enrique Arias Jiménez, jefe de administracción de ERESA. "No tiene importancia. No hay ningún escándalo; es algo que no tiene trascendencia ni para el Ayuntamiento, ni para el contribuyente. No hay más que la desgracia de una persona que ha tenido necesidades y se ha creído que con dinero público se podía arreglar. Tanto el responsable de Hacienda como yo nos hemos ofendido porque no queremos que nadie tenga la tentación de meter la mano en el cajón. Se le ha despedido y ha habido, además, arrepentimiento voluntario", afirmó el alcalde.

Arias Jiménez se presentó voluntariamente en el juzgado el lunes pasado y reconoció la sustracción de 45 millones para hacer frente a los gastos de las dos tiendas que posee de la marca CEDOSCE. La investigación del caso le ha correspondido al Juzgado de Instrucción 16 de Madrid, el mismo que investigó a Roldán y Carmen Salanueva, informa José Antonio Hernández.

CC OO y UGT manifestaron también, en referencia a los planes de privatización que tiene el Ayuntamiento para ERESA, su "oposición a la gestión privada de servicios que deben realizarse con estricto control público".

No es la primera vez que un recaudador municipal llega a los tribunales bajo la acusación de apropiación indebida. La creación de la Empresa Municipal de Recaudación surgió en 1986 para evitar situaciones como la desaparición de 361 millones en el distrito de Ciudad Lineal. Tres personas fueron procesadas: el responsable de la oficina, Fermín Merino, un hijo de éste, Francisco, y el empleado de la oficina José Monje. La Audiencia de Madrid absolvió a los tres porque el fiscal, según el tribunal, desarrolló incorrectamente la investigación y acudió al juicio "con una ausencia total de pruebas".