Fallaron todos los controles
El escáner detectó unas pilas similares a las de la bomba en una prueba posterior al atentado
Ni los investigadores ni los responsables políticos de las fuerzas de seguridad explicaron ayer en qué consistió el fallo que permitió el atentado. De hecho, el escáner de seguridad de la Audiencia Nacional funcionó, pero unas horas más tarde, cuando se probó con unas pilas similares a las que llevaba el ingenio explosivo. Las dudas sobre la autoría del atentado se complicaron con las hipótesis sucesivas respecto a la forma en que el libro bomba había pasado los controles de seguridad del edificio judicial.El libro bomba que seccionó tres dedos al presidente de la sección segunda de lo Penal de la Audiencia Nacional pasó el escáner de la Audiencia en el interior de una saca de Correos que contenía toda la correspondencia del día dirigida a la Audiencia Nacional, según afirmaron fuentes de ese organismo.
El escáner que permite inspeccionar el contenido de los bultos, paquetes, maletines o bolsos de los abogados, periodistas o visitantes de la Audiencia obtiene una imagen que puede ser almacenada temporalmente, pero que normalmente, según fuentes policiales, se elimina al obtener la imagen del siguiente objeto que se introduzca en el aparato. La saca, cuyo contenido ya había sido inspeccionado por separado en la central de Correos, en la plaza de la Cibeles, de Madrid, se introdujo en el escáner de cinta sin que el funcionario de policía a su cargo advirtiera nada anormal. La imagen tendría que haber mostrado al menos las tres pilas que el artefacto explosivo llevaba en su interior. Los especialistas dudan de que el aparato hubiera podido detectar los 100 gramos de Goma 2, explosivo del que estaba compuesto el libro bomba, pero se han hecho comprobaciones con el escáner en cuestión que demuestran su capacidad para detectar las pilas.
La imagen que el escáner obtuvo de la saca no fue conservada, puesto que fue reemplazada por el siguiente objeto que se introdujo en el mismo.
Artefacto rudimentario
El artefacto, según explicó el director general de la Policía, Juan Cotino, contaba con un sistema de activación por alivio de presión con tres contactos y un circuito eléctrico alimentado por tres pilas V 280 de 3,6 voltios. Se trata de un artefacto muy rudimentario cuya fabricación está al alcance de cualquier grupo con una mínima infraestructura.Cotino no supo explicar cómo falló "de manera tan rotunda la seguridad de la Audiencia Nacional", en palabras del vicepresidente primero del Gobierno, Francisco Álvarez Cascos. Interior creyó inicialmente que el artefacto no pasó por el escáner de la Audiencia, pues ayer mismo se comprobó que el aparato detecta pilas como las utilizadas en el libro bomba. También se sospechó que tampoco habría pasado el sistema de rayos X instalado en Correos, sino que habría sido llevado en mano a la audiencia e introducido por algún funcionario.
Algunos testigos aseguran, sin embargo, que el juez comentó tras la explosión que el paquete llevaba el sello de revisado y se inclinan por pensar que el librobomba pasó por el escáner de la audiencia, pero dentro de la saca de Correos y disimulado entre otros objetos.
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