Los socialistas entre la negociación y la ruptura
José María Aznar afrontó ayer su primer encuentro delicado en la ronda de presidentes autonómicos que abrió hace un mes con el presidente de la Xunta de Galicia, Manuel Fraga. Aznar, tras recibir a varios presidentes autonómicos de su partido y de sus socios nacionalistas, se encontró ayer con el primero de los tres presidentes socialistas que le planteó serias reservas al nuevo sistema de financiación autonómica, pactado entre el PP y CiU en sus líneas básicas.Aznar pretende, con esta ronda de conversaciones, limar aristas antes de convocar al Consejo de Política Fiscal y Financiera -organismo que reúne al Gobierno con los representantes de las comunidades autónomas- para decidir sobre el nuevo sistema de financiación, que tendrá que zanjarse para el 30 de septiembre. Chaves formalizó ante Aznar las reservas de la Junta de Andalucía que preside: Su oposición a liberalizar los topes sobre el 30% del IRPF traspasado a las comunidades y a la capacidad normativa del impuesto.
La posición de Chaves no responde a un pacto entre los presidentes socialistas. No hay un frente común. El presidente de la Junta dejó claro que hablaba en nombre de la institución que representa. No es una afirmación baladí. Chaves no coincide con las tesis de su compañero de partido el presidente de la Junta de Extremadura, Juan Carlos Rodríguez Ibarra.
El presidente extremeño se opone frontalmente al concepto mismo de corresponsabilidad fiscal, que sí asume el presidente andaluz y ayer ratificó en su encuentro con Aznar. Chaves está en una posición negociadora con el Gobierno en la que no entra Rodríguez Ibarra quien, mañana, miércoles, será recibido en La Moncloa.
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