Resurge un fantasmagórico grupo terrorista marroquí

, Por un lado, Hassan II impone a su huésped español el Gran Cordón de Ouissan Alaui; por otro, resurge un viejo fantasma que amenaza con llevar a cabo supuestas acciones terroristas en Ceuta y Melilla.

La Embajada de España en Rabat y algunos medios de comunicación españoles recibieron ayer por fax, en el último día de la visita a Marruecos de José María Aznar, un comunicado en árabe de la Organización del 21 de Agosto para la Liberación de los Territorios Expoliados, un grupo terrorista aficionado que, tras 20 años de silencio, reapareció brevemente en la primavera de 1995 tras la adopción por las Cortes de los estatutos de autonomía para las plazas de soberanía.

Tras felicitar a Aznar por su elección, el texto de la organización proclama "la voluntad de seguir la lucha con acciones de resistencia en el futuro si continúa la política de sus predecesores de anexión de los territorios marroquíes ocupados" de Ceuta y Melilla. "No somos una organización terrorista como algunos se creen porque nuestro objetivo es sagrado y noble ( ... ) y seremos los primeros en saludar la paz", añade.

El grupo, que actuó hasta la Marcha Verde que supuso en 1975 el inicio de la descolonización del Sáhara, revindicó en abril de 1995 dos pequeñas explosiones en Ceuta que sólo causaron escasos daños materiales. La Delegación del Gobierno en la ciudad les restó cualquier intencionalidad terrorista, pero el entonces ministro de Exteriores, Javier Solana, anunció que sería vigilante.

El Cesid (servicio secreto español) considera imposible que en un país como Marruecos se puedan enviar faxes desde teletiendas o se hagan declaraciones a la prensa, como las hizo Mohamed Abdu, responsable del grupo, sin contar, por lo menos, con el beneplácito de alguno de los numerosos servicios de seguridad marroquíes.

Ésta ha sido, en opinión de algunos organizadores de la estancia de Aznar, la única nota discordante durante la visita presidencial.