Una moción de censura islamista aumenta el caos en a agonizante coalición turca
El primer ministro turco, Mesut Yilmaz, retó ayer a sus rivales de la comatosa coalición minoritaria a que afronten el riesgo de unos nuevos comicios. "Dejernos que quien quiera unas elecciones anticipadas presente la propuesta al Parlamento, y la apoyaremos", declaró Yilmaz a los periodistas, horas antes de que la oposición islamista presentase una moción de censura. Lo que da tintes surrealistas a la situación política turca es que el Partido de la Recta Vía (DYP), que encabeza la ex primera m1nistra Tansu Çiller y que es socio de la coalición gubernamental, ha indicado que votará a favor de esa moción de censura."La gente habla de elecciones anticipadas desde hace tiempo, pero nadie hace nada al respecto", añadió Yilmaz. Sin embargo, los islamistas del Partido del Bienestar (RP) parecen preferir derrocar al Gobierno en el Parlamento y alcanzar el poder a través de éste, en lugar de convocar nuevamente a las urnas. El RP fue el partido más votado en los comicios del 24 de diciembre pasado, pero los dos partidos conservadores y laicos -el de la Madre Patria (ANAP), que lidera Yilmaz, y el DYP- se unieron para impedirle gobernar. El RP hizo un llamamiento al Parlamento para que celebre el jueves una sesión extraordinaria en la que se debata la moción de censura. Según su líder, Necmettin Erbakan, "una gran mayoría" de los 550 diputados votará a favor de derribar al Gobierno. El Parlamento se, encuentra en periodo vacacional hasta el 3 de junio pero se espera que el presidente de la Cámara convoque la sesión en el fecha solicitada, ya que, según la Constitución, basta la petición de un quinto de los diputados (110) para celebrar una sesión extraordinaria. El RP tiene 158 escaños.
Ciller presiona a su socio para que dimita desde que a primeros de mes el Tribunal Constitucional falló a favor de la demanda, presentada por los islamistas, de anular el voto de confianza obtenido por el Gobierno en marzo pasado.
Yilmaz, con el apoyo del jefe del Estado, Suleimán Demirel, se niega a dejar la jefatura del Gobierno hasta que no pierda la confianza del Parlamento o hasta que los ministro del DYP abandonen el Gabinete.
Los socialdemócratas de Deniz Baykal (CHP, que tiene 49 escaños) también han anunciado que votarán contra el Gobierno.
