Violencia en Pamplona

Leímos con gran interés el artículo La violencia cae sobre Pamplona, que se publicó el pasado domingo 12 de mayo en EL PAÍS. Pese a vivir a 450 kilómetros de nuestra ciudad natal por razones de estudio, nos sentimos muy afectados por las noticias que llegan desde nuestra querida Vieja Iruña y la imagen que se tiene de ella en el resto de la Península.El artículo nos parece que refleja bastante bien la situación que se vive en la capital navarra, dentro de lo que se puede expresar en una página de papel, sin vivirlo. Es triste ver nuestra tierra en los medios de comunicación únicamente por esta serie de acontecimientos que se repiten cada fin de semana desde hace demasiado tiempo.

Tal vez se quede un poco escaso en lo que se refiere a la movilización social en favor de la paz. En el último año las movilizaciones han tenido un considerable aumento de participación ciudadana. En las últimas concentraciones de Gesto por la Paz a las que hemos acudido (en Semana Santa) éramos ya 2.000 personas cada lunes las que pedíamos la libertad de los secuestrados, bajo una lluvia de insultos y amenazas proveniente de la contramanifestación de los "Iibertadores de Euskal Herria", de las Gestoras Pro Amnistía.

Por supuesto, el conflicto se vive en la calle; insultos, amenazas e incluso alguna agresión para quien lleve un lazo azul en el Casco Viejo (lo hemos vivido en nuestras propias carnes). Los cuatro individuos de Jarrai dicen representar y defender a toda la juventud, destrozando todo lo que encuentran y provocando, la actuación indiscriminada de la policía, que la sufrimos todos. Pero los incidentes no dejan de ser hechos puntuales, frecuentes pero puntuales.

Pamplona es una preciosa y acogedora ciudad donde se vive estupendamente bien. Cómo pueden corroborar los jóvenes que vienen de fuera para estudiar en nuestras universidades, todo el mundo es muy bien recibido y respetado como un pamplonica más, sea cual sea su procedencia.

Pamplona no es únicamente desmanes sanfermineros y violencia. La Vieja Iruña es muchísimo más; es la historia del reino más antiguo de Europa, es el folklore de una de las culturas más antiguas del mundo, es una excelente gastronomía, un maravilloso paisaje prepirenaico, es una gente sin igual; y para quienes hemos nacido allí, Pamplona lo es todo- y Patxi Agurondo.