El fraude al presupuesto de la UE fue de 183.360 millones, en 1995

El fraude al presupuesto comunitario alcanzó el año pasado 1.146 millones de ecus (183.360 millones de pesetas), un 1,4% del presupuesto, según el informe anual presentado ayer por la comisaria sueca, Anita Gradin. Aunque Gradin insistió en su preocupación por la gravedad de la cifra, ésta sólo ha aumentado en 36 millones de ecus (5.760 millones de pesetas), bastante menos que el crecimiento global del presupuesto.Los casos detectados ascendieron a 4.700. Las irregularidades más graves por su importe están concentradas: sólo un 10% de los expedientes totaliza más del 50% de lo defraudado. Casi todos ellos tienen en común su carácter transnacional. Son operaciones realizadas por mafias organizadas.

El fraude en los gastos administrados por los Estados miembros superó un tercio del total, 383 millones de ecus. El detectado en los ingresos alcanzó 735 millones de ecus. El engaño se produce en todas las partidas. La mitad de los casos de defraudación afecta al gasto agrícola, que también supone la mitad del presupuesto. Entre las partidas en que más aumentó el fraude figuran los fondos estructurales. Los países más defraudadores fueron, entre 1992 y 1994, Italia, Bélgica y Francia en los ingresos; e Italia, Grecia y Alemania, en los gastos: Italia alcanzó más de la mitad del total defraudado en este último concepto, cerca de seis veces más que España.