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Solidaridad con el argelino agredido en el metro

Paz Álvarez

PAZ ÁLVAREZ Un ojo, una pierna y el recuerdo de su peor sueño. Todo eso lo perdió Miloud Gaodari, argelino de 24 años, la noche del pasado miércoles cuando salió en ayuda de una joven a la que un hombre estaba atacando en la parada de metro de Embajadores. Entonces, el agresor le tiró a la vía y un convoy le arrolló. Tumbado en una habitación del Doce de Octubre, Miloud recibió ayer la visita de decenas de personas. Algunos, amigos y compatriotas. La mayoría, desconocidos para él. Todos a la vera del héroe. Un ama de casa, Gregoria Fernández, de 61 años, comentaba a pie de la cama: "Hay que ayudar a este hombre como sea. Ha salvado la vida de una chica y ha arruinado la suya". Miloud recorre con el único ojo que le queda, el izquierdo la habitación. No entiende nada. Habla francés y unas palabras de español. PASA A LA PÁGINA 3

VIENE DE LA PÁGINA 1

Una asociación pedirá un permiso de trabajo para un argelino mutilado en el metro al intentar salvar a una joven

En la cabecera de la cama, Miloud tenía ayer su única tabla de salvación. Se llama Maria Arrillaga, es trabajadora social de la Asociación Madrid Puerta Abierta. A ella sólo le preocupa un pequeño detalle que puede devolver a Miloud, cojo y sin un ojo, otra vez a Argelia: el permiso de residencia. Entre sus escasísimas pertenencias no hay ni un papel.Miloud cuenta que lleva dos meses en España. "Llegué escondido en un barco y no tengo permiso de residencia. Es muy difícil conseguir un pasaporte en Argelia", explica. Ante la elección de regresar a su país o quedarse en Madrid, no duda un instante: "Aquí", dice. Luego suspira. No quiere volver al equipo fútbol de segunda división en el que jugaba en Argelia; tampoco a la tienda de alimentación que le empleaba antes de embarcarse, como polizón, en busca de una vida mejor. "Quiero encontrar un trabajo, no importa de qué. Sólo quiero trabajar aquí", insiste. No se deja fotografiar.

La trabajadora social está al quite: "¿Quieres que te tramitemos- un permiso de trabajo?". Antes de terminar la frase, tiene la respuesta, de palabra y de gesto: "Sí". María explica que solicitará un permiso de trabajo extraordinario, al que pueden optar aquellos ciudadanos extranjeros que han contribuido de forma notoria al progreso económico o cultural de España. "Tenemos que luchar para conseguir que su estancia sea legal. Es un héroe y hay que recompesarle" dice.. Pero Miloud no recuerda que salvó la vida de una chica a la que atacaba un hombre en la estación de Embajadores. Tampoco que el agresor le empujó y un convoy le dejó sin visión en el ojo izquierdo, le amputó una pierna y le trituró la otra. "No me acuerdo, sólo que me desperté aquí sin ropa y sin nada", dice. La enfermera le manda descansar y él pide un diccionario.

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Sobre la firma

Paz Álvarez
Periodista especializada en gastronomía. Licenciada en Periodismo por la Universidad Complutense de Madrid, tiene un programa de desarrollo directivo por el IESE. En 1993 comenzó a escribir en la sección de Madrid y, en 1997, se incorporó al diario CincoDías, donde creó la sección de Directivos y ha sido jefa de la sección de Fortuna hasta 2022.

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