Francia bloquea la entrega a España de Josu Ternera aduciendo problemas legales

"Es muy dfícil" que José Antonio Urrutikoetxea Bengoetxea, Josu Ternera, sea entregado por París a las autoridades españolas. Cuando faltan apenas 24 horas para que el jefe etarra acabe de cumplir condena, el Ministerio del Interior francés insiste en que no le expulsará hacia España mientras la Audiencia Nacional no deje sin efecto dos órdenes de busca y captura dictadas contra el etarra. Este problema legal, salvo que se solucione in extremis, impedirá al presidente francés, Jacques Chirac, cumplir el compromiso que adquirió en marzo con Felipe González. Lo más probable es que París asigne residencia a Josu Ternera en una región del noreste del país.

El apoyo que el pasado 29 de marzo prometió el presidente Chirac a Felipe González, en relación con el caso Josu Ternera, puede quedar en papel mojado si el Ministerio del Interior francés mantiene su postura inflexible. Éste ya advirtió hace dos semanas que no pondría al etarra a disposición de las autoridades españolas si no se anulaban dos ordenes de busca y captura, cumpliendo así la doctrina establecida por los tribunales europeos.El Ministerio de Justicia francés comunicó el pasado martes a la Embajada española en París que Urrutikoetxea "está disponible a efectos jurídicos", sin referencia alguna a una hipotética entrega administrativa.

La Audiencia Nacional se niega a dejar sin efecto las dos órdenes que pesan sobre Urrutikoetxea: una vinculada a los denominados papeles de Sokoa, y otra por los seguimientos que presuntamente realizó sobre el ex subcomisario José Amedo y sobre Eduardo Santos (cuando éste era director de Industrias Siderometalurgicas y Navales). La audiencia no cree que esto sea un obstáculo y recuerda el precedente de José Ramón López de Abetxuco, que fue entregado por Francia en julio de 1993, pese a que días antes se había dictado contra él una busca y captura.

Josu Ternera, de 46 años, acaba de cumplir la condena de 10 años de reclusión que le fue impuesta en 1990 por asociación de malhechores, gracias a la aplicación de diversos beneficios penitenciarios. En las próximas horas abandonará la prisión de Muret, próxima a Toulouse.

La condena impuesta en su día a Urrutikoetxea conlleva la prohibición de residir durante los próximos cinco años en territorio francés. Pero fuentes de la defensa del dirigente de ETA consideran que tal prohibición se refiere sólo a la región de los Pirineos Atlánticos.

Fuentes del Ministerio de Justicia e Interior español reconocieron que la situación se ha complicado y que "es muy difícil" que Josu Ternera sea expulsado de Francia y después capturado por la policía española en la frontera. A pesar de eso, según las mismas fuentes, el caso no está cerrado y ayer continuaban "haciendo gestiones".