La derecha y la izquierda italiana se disputan al ex fiscal Di Pietro
La presencia ayer en Roma de Antonio di Pietro para asistir al comité parlamentario para los servicios secretos y una hipotética entrevista con el secretario del Partido Democrático de la Izquierda, Massimo d'Alema, que no se produjo, alimentaron la expectación y el debate que suscitaron el domingo las declaraciones del ex fiscal de Manos Limpias anunciando su entra da en la política activa con un movimiento autónomo de cuya constitución no dio fecha. Desde ambos lados del arco político se sucedieron las opiniones sobre la decisión de Di Pietro.
El Olivo, la coalición de centro izquierda vencedora de las elecciones del pasado día 21, no quería dejarse escapar la colaboración prestigiosa del símbolo de la lucha contra la corrupción, mimado también por el derechista Polo de la Libertad, que está a la expectativa de sus decisiones. Di Pietro, que la semana pasada almorzó con su mujer en Bolonia en casa del futuro jefe del Ejecutivo, Romano Prodi, después de haberlo hecho con anterioridad con Clemente Mastella, ex democristiano del Polo, ha hablado con todos y se ha mostrado considerablemente molesto con quienes califican de "consultas" sus varias entrevistas y le describen como indeciso entre el Olivo y el Polo.Dejándose querer por unos y otros y manteniendo en la reserva su alto prestigio personal, dará lo más parecido a su primer comicio el próximo día 14 en su pueblo natal, Montenero de Bisaccia, donde están habilitando una carpa para la que consideran tan grande ocasión.
Y aunque el ex magistrado anticorrupción ha apagado cualquier expectativa de que vaya a pronunciarse allí sobre su futura carrera política, diciendo que hablará sólo de civismo y de valores humanos, nadie se atreve a descartar que deshoje en público la margarita y explique en qué lugar del arco político se colocará el movimiento cuya creación ha anunciado.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.