Alemania y España piden la limitación del uso de redes de enmalle a la deriva
Alemania protagonizó ayer un cambio que puede acabar resultando decisivo en favor de la limitación del uso de redes de enmalle a la deriva. Así lo expresó ayer en el consejo de ministros de Pesca. Su cambio puede acabar arrastrando hacia las mismas posiciones a la Comisión Europea -que sigue apostando por la prohibición total y dificulta así la obtención de un acuerdo- y a medio plazo al Reino Unido e Irlanda, lo que permitiría por fin que los partidarios de prohibir o reducir en lo posible ese depredador arte pesquero puedan alzarse con la mayoría necesaria en el consejo de ministros de Pesca.
Ya sólo hay cuatro países que siguen oponiéndose hoy a todas las fórmulas propuestas para acabar con el uso de este tipo de redes, famosas por su capacidad depredadora y por haber provocado graves conflictos entre los pescadores españoles con franceses o italianos. Alemania y Austria se sumaron ayer a las tesis españolas al apoyar la alternativa que desde hace meses está sobre la mesa: permitir el uso de estas redes dentro de las 12 millas costeras y con la condición de que la red nunca supere los 2,5 kilómetros de largo.Esta alternativa permite concitar el apoyo de los países nórdicos, que defienden el uso de este tipo (le redes en la pesca del salmón. Los científicos sostienen que el uso de las redes de volantas en alta mar es muy dañino, pero admiten que ese daño es mucho menor cuando se concentra su uso en la desembocadura de los ríos. Alemania y Austria anunciaron ayer en el consejo de ministros de Pesca que apoyarían la propuesta de la Comisión si en esta se introducía esa salvedad, que permitiría diferenciar entre la pesca en el Báltico y la pesca en el Atlántico y el Mediterráneo.
A pesar del cambio de actiitud de Alemania, la comisaria Emma Bonino se negó ayer a modificar la propuesta de Bruselas, que plantea la prohibición total de esas redes a partir del 1 de enero de 1998. La posición de Bonino ha sido tradicionalmente criticada por España, interesada fundamentalmente en prohibir las redes de volandas en alta mar y acabar así con los conflictos que se dan en la costera del atún. El ministro español en funciones, Luis Atienza, no quiso ayer acusar de parcialidad a la comisaria, a pesar de que Italia posee la mayor flota comunitaria de volantas. No obstante, Atienza sí subrayó que la comisaria no está ejerciendo toda la capacidad de iniciativa que tiene la Comisión Europea. Bonino dijo que sólo cambiará su propuesta si los Estados lo piden por mayoría. Pero todos saben que esa mayoría no existe hoy pero podría existir si la Comisión apadrina la alternativa de las 12 millas: en ese caso, es más que probable que Irlanda y el Reino Unido cambiaran su voto y dejaran aisladas a Francia e Italia.
Mayores coincidencias se dieron entre los Quince al calificar el informe presentado por Emma Bonino sobre el esfuerzo pesquero, entre 1997 y 1999 y que pide recortes de entre el 17% y el 40% en casi todos los caladeros. El informe, elaborado por un grupo de expertos presididos por el danés Hans Lassen, será la base de la propuesta de recortes que acabará presentando la Comisión. Todos los ministros coincidieron en señalar que se deben tener en cuenta las condiciones socioeconómicas, además de los datos científicos.
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