Falta de respeto
En la mañana del Domingo de Resurrección, la segunda cadena de Televisión Española, transmitió, en directo, la bendición de su santidad el Papa, acto en que el pastor pronuncia su mensaje para que sea captado por los oyentes, pero no fue así, por culpa de un locutor que, sin respeto ni buena educación, con su palabrería no dejó entender lo dicho por el obispo de Roma, dando lugar a una bochornosa transmisión. Cuando el Papa se dirige a un auditorio, éste debe guardar silencio, pero, lamentablemente, un locutor, que, debió confundir el acto con un espectáculo circense o deportivo, o bien, simplemente con la información sobre algo ocurrido, impidió que el mensaje llegase a su destinatario, especialmente cuando se decían frases en diferentes idiomas, pues la educación obliga a que, aunque uno no los entienda, pueda oírlos al que, lejos de su patria, le lleguen en su propia lengua.- .