Chirac evoca ante Li Peng la necesidad de respetar los derechos humanos

Jacques Chirac logró ayer, durante un almuerzo, mencionar por fin las palabras "derechos humanos" ante el primer ministro chino, Li Peng. El número dos chino había obligado la víspera al primer ministro francés, Alain Juppé, a suprimir los discursos de la cena, para que no se hablara en su presencia de la ausencia de libertades en su país. Li Peng, en visita oficial a París, organizó el viaje sobre un acuerdo básico: firmaría grandes pedidos a la industria francesa, a cambio de que sus anfitriones tuvieran la gentileza de evitarle lecciones políticas. El miércoles, Li Peng cerró contratos por 250.000 millones de pesetas.En el almuerzo de ayer, el presidente francés "habló de muchos asuntos con el dirigente chino, y, como hizo ya en su reciente reunión en Bangkok, abordó la cuestión de los derechos humanos", dijo un portavoz del Elíseo. El miércoles, la delegación china obligó a Juppé a anular su discurso, porque contenía esta frase; "Todo desarrollo económico y social duradero se acompaña de progresos paralelos de la democracia y los derechos del hombre". Antes de la cena sin discursos, el ministro francés de Asuntos Exteriores, Hervé de Charette, entregó a los acompañantes de Li Peng una lista de presos políticos chinos cuya liberación era "solicitada por Francia". Un portavoz chino afirmó sin embargo que se les había entregado "un papel sin ningún nombre como otras veces".