_
_
_
_
Tribuna:
Tribuna
Artículos estrictamente de opinión que responden al estilo propio del autor. Estos textos de opinión han de basarse en datos verificados y ser respetuosos con las personas aunque se critiquen sus actos. Todas las tribunas de opinión de personas ajenas a la Redacción de EL PAÍS llevarán, tras la última línea, un pie de autor —por conocido que éste sea— donde se indique el cargo, título, militancia política (en su caso) u ocupación principal, o la que esté o estuvo relacionada con el tema abordado

La República

Manuel Vicent

El próximo presidente del Gobierno, José María Aznar, ha elegido para leer en estas viacaciones una obra de Josep, PIa, La historia de la II República Española. Se trata de un exabrupto terrible contra el régimen del 14 de abril, escrito en 1940, que el autor, avergonzado, repudió poco después. De hecho, esos cuatro volúmenes no han sido incluidos en sus obras completas, pese a la voracidad recopiladora del editor Vergés, que ha exprimido a Pla hasta el último apunte. En el prólogo de la historia de la II República, Josep Pla agradece el magisterio de Manuel Aznar, el abuelo del próximo presidente del Gobierno. Si ahora el nieto pretende enterarse en qué consistió la República Española por esta obra, en ella no hallará sino odio, caricatura, improperios, propaganda fascista y desprecio a la democracia. El estilo de Pla, esta vez está puesto al servicio de la agitación política y del propio sentido reverencial de pequeño burgués ante la polaina militar. Tengo a Josep Pla por uno de los mejores escritores del siglo XX Daría un dedo por haber escrito algunas de sus páginas. Es descorazonador que en manos de Aznar, próximo presidente del Gobierno, haya caído precisamente este engendro elaborado cuando la sangre de la guerra civil aún estaba caliente, un bodrio que Pla después perseguía por todas las librerías para quemarlo. Dentro de unos días se cumplirá el aniversario de la República. El espíritu del 14 de abril forma parte del romanticismo. Tal vez aquella energía que concentraba el afán regeneracionista de nuestros mejores intelectuales, literatos y científicos quedó dilapidada por la ingenuidad o insensatez de algunos políticos, pero si bien aquel régimen de momento hoy no es viable, su espíritu pertenece al patrimonio secreto de muchos españoles y forma parte de su corazón. Señor Aznar, tire directamente ese libro a la basura. Ni el extraordinario talento literario de Josep Pla se merece esa pública humillación, ni la República Española, cuando está tan cerca del 14 de abril, se merece ese escarnio.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Sobre la firma

Manuel Vicent
Escritor y periodista. Ganador, entre otros, de los premios de novela Alfaguara y Nadal. Como periodista empezó en el diario 'Madrid' y las revistas 'Hermano Lobo' y 'Triunfo'. Se incorporó a EL PAÍS como cronista parlamentario. Desde entonces ha publicado artículos, crónicas de viajes, reportajes y daguerrotipos de diferentes personalidades.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_