¿Saben los españoles qué comer para reforzar su hierro o calcio?

Una nutrición equilibrada requiere un número de nutrientes diarios que sólo los proporciona el comer de todo. ¿Pero saben Ros españoles qué cantidad de proteínas, grasas o minerales ingieren con un filete o un yogur desnatado?, o ¿qué deben comer para fortalecer sus reservas de hierro? El Ministerio de Sanidad y el departamento de Nutrición de la Universidad Complutense de Madrid se han propuesto comprobarlo y en tres años ya llevan analizada la composición de 68 alimentos del mercado, frescos y envasados.

El producto de este trabajo conjunto se ha traducido en las primeras Tablas de composición de alimentos españoles, presentadas ayer en el Ministerio de Sanidad. A estas seguirán otras hasta analizar el total del mercado alimentario.De momento se han estudiado productos de nueve grupos de alimentos: carnes y derivados cárnicos, pescados, huevos, leche y productos lácteos, cereales, legumbres, hortalizas y verduras, frutas y conservas de todo tipo. De cada uno de ellos se han recogido 10 muestras que se analizaron por triplicado.

Una primera aplicación será la de permitir estudios epidemiológicos comparativos sobre la nutrición en las distintas regiones de España. "Podremos comprobar así quien se alimenta peor, y mejor", indico María Luz Carretero, responsable de Ordenación Alimentaría del ministerio de Sanidad. Las referencias hasta ahora en este sentido venían de los estudios elaborados en otros países occidentales.

Vitaminas y zinc

Otra aplicación, más inmediata, podría dar a médicos y consumidores pautas para adecuar la dieta a unas necesidades concretas. Según Ana Requejo, directora del departamento de Nutrición de la Universidad Complutense, los españoles tienen cierta carencia de vitamina D y de zinc. ¿Saben que una de las mayores reservas de vitamina D está en las conservas de sardinas en aceite?.La nueva guía lo pone en claro. De los alimentos analizados hasta ahora se desprende que los que más vitamina C proporcionan son, por este orden, la naranja, los melones, los tomates frescos, judías verdes, espárragos verdes y patatas. El queso manchego semicurado o en porciones ha resultado tener más vitamina A que el tomate o la lechuga. Y para tomar vitamina E no están mal surtidos el bonito o atún en aceite, el melocotón en almibar, los garbanzos y las alubias.

"Para una nutrición equilibrada tiene que haber alimentación variada", insistió Ana Requejo. Los españoles parecen estar abandonando precisamente las legumbres, una de las fuentes importantes de hidratos de carbono, que según indicó María Luz Carretero, hace aguas en la dieta moderna en favor de un consumo excesivo de proteínas animales. "¡Hay que comer más legumbres y más pan!", recalcó.

El consumo de fruta y verdura parece seguir siendo el adecuado en los hogares españoles, así como también el de pescado. En general, la dieta española es equilibrada, sostuvo Carretero, salvo la excepción citada del alto consumo protéico. La carne, reina de muchos hogares, aparece analizada en el libro, con todos sus componentes nutritivos, desde el contenido en agua hasta su cantidad vitaminas.

En cuanto al colesterol, las amas de casa ya intuyen la diferencia entre un lomo de añojo 0 de cerdo. Es exactamente esta: 67,5 miligramos de colesterol por cada 100 gramos de carne en el primero, frente a 70,6 miligramos en el segundo, y esto si es magro. Si de lo que se trata es de cumplir con las necesidades de grasa, más" aceite de oliva, coincidieron las expertas. Se consume bastante, pero aún no lo suficiente, estimaron.