Fuertes criticas a la Ertzaintza por el colapso de tráfico en el País Vasco
La Ertzaintza (policía vasca), fuertemente criticada, reconoció ayer que podría haberse evitado el colapso en la red principal de carreteras de la comunidad prohibiendo el tránsito de camiones desde el martes. La decisión fue adoptada por Interior un día después, cuando cientos de vehículos pesados obstaculizaban el paso en la N-I entre Salvatierra (Alava) y el puerto de Etxegarate (Guipúzcoa). Por otra parte, la familia que había desaparecido en las montañas de Aller (Asturias) fue rescatada en helicóptero.
Los camiones comenzaron ayer a circular con cierta normalidad por todas las carreteras vascas. Los problemas, en su mayoría sólo retenciones, se localizaron en la N-I, a la altura de Alsasua (Navarra), y en el puerto guipuzcoano de Etxegarate. Después de tres días de borrasca, la Ertzaintza recibió ayer fuertes críticas por no haber evitado el colapso y las consiguientes situaciones límite para los conductores que se quedaron atrapados dos noches en una vía principal como la N-l. Cientos de ciudadanos tuvieron que sobrevivir gracias a la solidaridad de los vecinos de los pueblos cercanos.La policía vasca reconoció que se podía haber evitado el colapso prohibiendo el tráfico de camiones un día antes. Sin embargo, "esa decisión podía haber incrementado las pérdidas de las empresas de transportes". La Confederación Española de Transportes (CETM) cifró en 3.000 millones de pesetas las pérdidas por esta parálisis. Las factorías Fasa-Reanult de Valladolid y Palencia dejarán de fabricar 3.340 vehículos por falta de piezas procedentes de Francia. Cien camiones y tres trenes que las transportaban han permanecido retenidos en la frontera.
En Asturias, un helicóptero rescató a los cuatro miembros de la familia desparecida en las montañas de Aller. La Guardia Civil de montaña los localizó en una cabaña de pastores, a más de 1.500 metros de altitud, donde en la tarde del pasado lunes Francisco González García, de 50 años; su esposa, Felicidad Álvarez Fernández, de 48, y dos de sus hijos, Jorge y Francisco José, de 26 y 20, respectivamente, se vieron sorprendidos por un fortísimo temporal de nieve que ha azotado la región durante los últimos días.
Miembros de la Guardia Civil también lograron alcanzar ayer el refugio en el que se encontraban siete jóvenes en Palombera (Cantabria).
El temporal se ha cobrado la vida de dos personas. Josefa Izquierdo, de 53 años, murió en Pobo (Teruel) al resbalar en el hielo y golpearse la cabeza. En Castro de Rei (Lugo), Bienvenido Pérez, de 63, falleció al caerse a una charca.
Según Protección Civil, a media tarde de ayer permanecían aisladas por la nieve 1.696 poblaciones, con al menos 50.000 residentes, a lo largo del Cantábrico, La Rioja y Soria. Más de 31 capitales registraron ayer temperaturas por debajo de los cero grados. En Burgos el termómetro alcanzó los 9 grados negativos.
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