Todo previsible

Tal como se preveía, Elías Yanes -arzobispo de Zaragoza- resultó ayer elegido presidente de la Conferencia Episcopal hasta 1999, por 53 de los 73 votos emitidos. Lo mismo ocurrió con el vicepresidente, Fernando Sebastián -arzobispo de Pamplona y obispo de Tudela-, con 44 de los 68 votos.La primera comparecencia informativa de Yanes en su nuevo mandato abundó en actitudes previsibles. Tras reiterar que la Conferencia, ante las elecciones, se ha "autolimitado" para no aconsejar ningún partido concreto, negó que la Iglesia tenga corporativamente influencia en la línea ideológica de la COPE.

Pese a que algunos obispos catalanes han hablado de "maridaje" de la cadena de radio con el PP, Yanes señaló que "los responsables" de la COPE tienen "su autonomía propia", y que "no se le puede pedir a un medio que mantenga la distancia que los obispos debemos mantener". Yanes hizo balance de sus relaciones con el Gobierno y explicó que siempre ha intentado dialogar, "porque nuestro estatuto indica que el presidente de la Conferencia debe cuidar la relación con la autoridad civil, y porque personalmente estoy convencido de que lo que no se consiga con el diálogo no se alcanza por otra vía".

Como "aspecto parcialmente negativo" citó el contencioso de la clase de religión, y aclaró que el futuro está ya en manos de la Comisión Mixta que entiende de los acuerdos Estado-Santa Sede. Yanes negó que el nuncio haya decidido negociar él, marginando a la Conferencia. "Se ha tocado techo y el nuncio ha convocado a la Comisión Mixta porque es el órgano competente", dijo Yanes. "La relación con la Nunciatura se ha reforzado".

"Las amenazas en España", dijo, "son la cultura secularizante, el materialismo práctico y las deficiencias de la acción pastoral católica".