Violencia
Ante el asesinato del colega, paisano y amigo Fernando Múgica Herzog, el entrañable Poto, quisiera simplemente precisar dos cosas:1. Un Estado de derecho no puede nunca permanecer pasivo ni ser renuente o mero espectador del crimen. El derecho es una manta que debe cobijar a la sociedad, y el Estado, su tejedor, olvidando cualquier veleidad maniquea, debe confeccionarla a medida de esa sociedad a la que está obligado a servir.
2. La violencia no es en sí algo intrínsecamente malo ni bueno. Es una herramienta, y su perversión puede estar en el uso de dicha violencia. Prescindir de la violencia legal es desnudar al derecho y dejar al ciudadano inerme ante la injusticia. El Estado como monopolista de esa violencia no puede permitir que alguien que no está amparado en su cúpula la ejerza. La violencia es una exigencia de todo Estado de derecho maduro, el requisito de toda democracia real.-
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