Armillilita triunfó en su corrida número 1.000

Begoña / Armillita, Joselito, Ochoa

Toros de Begoña, presentables y descarados. Armillita: ovación y al tercio; oreja. Joselito: silencio; palmas. Fernando Ochoa, que confirmó la alternativa: ovación y al tercio; palmas. Monumental Plaza de México, 4 de febrero, tres cuartos de entrada.

Armillita despertó de su largo letargo y triunfó en su corrida número 1.000 al cortarle una oreja a su segundo enemigo. Lo recibió de hinojos con una larga cambiada y mostró su prodigiosa muñeca ante un burel que le tiraba hachazos a diestra y siniestra. Su faena fue heroica y su toreo por abajo lo ejecutó con entrega y sentimiento. Ante el maulón segundo el diestro estuvo con una decisión inusitada pues consiguió que el ejemplar acometiera su muleta y repitiera los viajes.Joselito cargó con el peor lote de la peligrosa mansada de Begoña. Enseñó la magia de su percal al tercero del. festejo y con solera instrumentó verónicas y armoniosos lances. Con la sarga dio una lección de técnica y aguante.

En el encuentro con el caballo, el picardeado quinto hizo volar por el aire al picador Emilio Sánchez. Aunque la fiera se colaba por el pitón derecho, con casta y pundonor Joselito le empalmó valientes redondos pero, como el fuerte viento lo descubría, optó por abreviar.

Al distraído astado de su confirmación, Ochoa lo sometió con la flámula hasta que colaboró. Su quehacer fue acompasado. Ante el barrabás que cerró plaza, no se amedrentó. Con soltura lo trasteó por la cara demostrando tener mucho sentido de la lidia.