Ruiz-Gallardón estira la línea 7 del Metro con 2.826 millones

Alberto Ruiz-Gallardón aprobó ayer un gasto de 2.826 millones para estirar la línea 7 de Metro desde la avenida de América a la plaza de Gregorio Marañón. Obras Públicas convocará un concurso para adjudicar estas obras. El Ejecutivo madrileño gobernó ayer por primera vez desde la quinta planta de la Casa Rosa, edificio al que se trasladó el pasado lunes el presidente regional, Alberto Ruiz-Gallardón. A la fuerza tuvo que dejar el inmueble que ocupaba, en la Puerta del Sol, por amenaza de ruina.

Ruiz-Gallardón aprobó su primera inversión importante, del nuevo año: la ampliación de la línea 7 del Metro, que arranca ahora en Las Musas (San Blas) y atraviesa la M-30 para llegar a la Avenida de América. Con el gasto de 2.826 millones decidido ayer se estira el pasillo ferroviario hasta la plaza de Gregorio Marañón, donde se unirá con los corredores de las líneas 8 y 10. Es la tercera obra subterránea aprobada del mandato de Ruiz-Gallardón, que comenzó en junio del año pasado. El Gobierno de Madrid había convocado con anterioridad los concursos para prolongar la línea 4 y unir las líneas 8 y 10. Presupuestó cada obra en 6.000 millones. La semana que viene resolverá los concursos: "Se han presentado muchas ofertas con bajas importantes sobre el precio de licitación", señaló ayer el consejero de Obras Públicas, Luis Eduardo Cortés. Ruiz-Gallardón prometió a los madrileños la construcción de 24 kilómetros de subterráneo durante la presente legislatura, que finafiza en junio de 1999.Además de las obras del metro, se aprobó ayer el plan de formación laboral para los parados del sur y del este (los municipios beneficiados por los cursos serán Parla, Fuenlabrada, Leganés, Torrejón, San Fernando de Henares, Alcalá y Rivas). El plan, con 3.327 mi llones de presupuesto, cuenta con ayuda europea.

El presidente regional habló en su nueva sede de los problemas de la vivienda pública. Señaló que el Instituto de la Vivienda de Madrid tiene que vender parte de sus propiedades -gestiona un patrimonio de 90.000 viviendas- y confirmó una deuda de 18.000 millones (EL PAÍS de ayer). Culpó del agujero a la anterior administración socialista. "Ha permitido que se dejen de ingresar numerosas cuantías", declaró según informa Europa Press."No hay ningún agujero"

Pero Miguel Palmero, gerente del Ivima entre 1992 y 1995, desmintió ayer al presidente regional. "No es verdad que exista un agujero de 18.000 millones de pesetas. Ese dinero corresponde a la subvención anual de la consejería de Hacienda al Ivima. Si no la han pagado será porque no hayan querido. Pero ni hay deuda ni hay agujero". Palmero asegura que los actuales gestores, del PP, conocían este hecho: "Les entregué un documento fechado el 13 de julio donde explicaba que la deuda real, de 15.181 millones, correspondía a la subvención de Hacienda y a 2.981 millones que aportaba el Ministerio de Obras Públicas".