La agencia internacional de garantía SGS certuficó la calidad de los suministros de Focoex a Uruguay

La Agencia internacional de Control SGS (Société Générale de Surveillance) verificó y confirmó el suministro a Uruguay del material educativo y de salud facilitado por la empresa pública española Focoex, con el asesoramiento de la sociedad Eductrade. SGS ha hecho constar que "durante nuestras verificaciones en los contratos mencionados no se encontraron equipos usados, averiados o de mala calidad y todos ellos correspondían a material nuevo, en perfectas condiciones para su puesta en marcha". SGS asegura que el equipamiento se ajusta, "tanto en calidad como en cantidad, a lo estipulado en el contrato firmado por ambas partes". Focoex rechaza la acusación de exclusividad que se atribuye a su relación con Eductrade.

La Societé General de Surveillance (SGS), con sede central, en Suiza, certificó que los suministros de Focoex a las autoridades sanitarias y educativas uruguayas respondían a los criterios de calidad, las exigencias de los contratos y las especificaciones que las autoridades uruguayas realizaron a los proveedores. La sociedad, de amplia experiencia en la verificación de contratos, establece incluso que "cualquier variación producida ha supuesto una mejora sin menoscabo de la calidad".La empresa pública Focoex (Fomento de Comercio Exterior) se hizo cargo de la gestión de operaciones de suministro de material educativo y de salud por importe de 131 millones de dólares a Uruguay, que es una parte de la línea de financiación española a aquel país establecida en el Tratado Comercial firmado en julio de 1992. Dicho tratado fijaba un marco límite de ayudas financieras de 200 millones de dólares a través de créditos mixtos (FAD y OCDE).Focoex llegó a un acuerdo con el Ministerio de Salud Pública (MSP) uruguayo para suministrar material de salud por importe de 86 millones de dólares y, además, acordó con la Administración Nacional de la Educación Pública (ANEP) el suministro de mate educativo por un importe de 45 millones de dólares, mediante dos contratos, de 23 y 25 millones de dólares cada uno de ellos.

La sociedad Eductrade participó, concretamente, en uno de los contratos firmados con el Ministerio de Salud Pública, por importe de 47,8 millones de dólares, como empresa asesora, aunque en régimen de asociación al 50% de los beneficios obtenidos en la operación. Este contrato implicaba la venta de material hospitalario. Educttade también asesoró, con el mismo régimen, los dos contratos firmados por Focoex con la ANEP.

Sin exclusividadFuentes de Focoex aseguran: "nunca hemos tenido, una relación de exclusividad con Eductrade". De hecho, para una parte de los contratos de equipamiento hospitalario, en el caso de las instituciones de Canelones y Las Piedras, se recurrió a la constructora Huarte. "La relación con Eductrade viene de antiguo, desde 1981, y para nosotros es cómoda; pero hemos tenido buen cuidado siempre de evitar la exclusividad". Los representantes de la sociedad pública no han querido realizar declaraciones individuales, que quedan sometidas a su propia estrategia informativa.

Los contratos con el Ministerio de Salud Pública de Uruguay y con las autoridades educativas se hicieron con las precauciones normales y por los procedimientos establecidos. Implican que la Hacienda uruguaya debe autorzar las peticiones de equipamiento que cualquier administración o empresa pública uruguaya quiera adquirir con cargo a los límites de crédito establecidos en el Tratado.Las especificaciones del material que se solicita vienen impuestas "en su totalidad", insistieron fuentes de Focoex, desde el solicitante, sea una empresa pública, un municipio o cualquier institución del país a quien se concede el crédito. La tarea de Eductrade es recomendar, con base en estas especificaciones, las mejores mejores calidades y los equipos adecuados a la petición realizada. El contrato contempla equipamiento médico más el transporte y la instalación, así como la póliza aseguradora de la empresa estatal Cesce. Asimismo, incluye una cláusula de garantía de 12 meses (o 15 desde el embarque).FalsedadesEl diario El Mundo publicaba ayer una crónica fechada en Montevideo en la que anunciaba que "Equipos suministrados por Polanco con créditos FAD se pudren en Uruguay sin desembalar", con un primer subtítulo en el que se aseguraba que "Eductrade recibió cientos de millones del Gobierno español por un material que nadie pidió". Título y subtítulo acumulan varias y notables falsedades, puesto que es Focoex quien suministra los equipos; los créditos FAD se conceden a Uruguay; Eductrade actuó como asesor en el caso de los contratos mencionados y, para colmo, se demuestra falso que es un material "que nadie pidió", puesto que no se suministra equipamiento sin petición expresa de las autoridades que obtienen el crédito.Las acusaciones recogidas por El Mundo están basadas en los pocos casos pendientes de los contratos de suministro y mencionaban, como si fuesen ejemplos y no los únicos casos registrados, las quejas de los hospitales Pasteur y Maciel sobre deficiencias en los equipos. En el caso del Pasteur, se citaba una carta al director del centro (15 de noviembre de 1995) en la que el doctor Enrique Sojo exigía que se devolvieran al vendedor dos fibroscopios y "que los recambien por otros nuevos, sin defectos". La crónica evitaba mencionar la carta de respuesta, fechada el 23 de noviembre, en la que se precisaba que uno de los fibroscopios había sido reparado y el otro enviado de nuevo al centro. En el caso de la reclamación del hospital Maciel, los representantes de Focoex en Montevideo detectaron que la institución "prefería la marca Siemens, en lugar de la que se facilitó", pero el servicio de los equipos de ecografías era bueno, como así se comprobó.Para evaluar la baja incidencia de las reclamaciones, los servicios sanitarios uruguayos solicitaron 10.076 equipos médicos, de los cuales la empresa pública no tiene acta de recepción de 189. De ellos, 82 están sin distribuir y el resto ya están en destino. En el caso del material educativo, quedaban por instalar dos plantas de ordeño y una planta conservera, con destino a la Escuela Agraria de San José, objeto de la información gráfica difundida ayer.