Un millón de palestinos votan hoy para elegir presidente a Arafat y un Parlamento autónomo

Soldados israelíes mataron ayer a tres palestinos en un camino de Cisjordania horas antes de la apertura de las urnas para las históricas elecciones generales que consolidarán el poder de Yasir Arafat en los territorios autónomos. El portavoz del Ejército israelí dijo que los tres palestinos fueron abatidos a tiros poco después de que éstos abrieran fuego contra los centinelas de un control militar en las cercanías de la ciudad norteña de Jenín. Fuentes palestinas manifestaron que los tres muertos eran miembros del movimiento radical islámico Hamás, la misma organización responsable de la emboscada que dejó un saldo mortal de dos soldados israelíes cerca de Hebrón esta semana. Un soldado israelí resultó herido en una pierna.

Escueto como era el informe militar israelí, daba una clara dimensión de cómo se agudiza el ambiente de tensión la víspera de las elecciones. A ello contribuyeron las advertencias de Israel y la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de que extremistas islámicos que boicotean la consulta están preparando una serie de ataques para sabotear los comicios de hoy. Ninguna de las organizaciones guerrilleras palestinas que luchan contra Arafat e Israel se atribuyó la responsabilidad del frustrado asalto cerca de Jenín. Unos 2.000 simpatizantes de los fallecidos arrancaron carteles electorales en Jenín e impidieron el paso a los candidatos al hospital adonde fueron trasladados los cadáveres. Hamás decretó tres días de luto.

El episodio, calificado como "crimen injustificable" por un alto responsable de seguridad palestino, ocurrió tras una jornada de reflexión para el millón de electores palestinos que deberán elegir hoy a los 88 miembros del flamante Consejo Palestino y a Arafat como su presidente. Las autoridades palestinas instaron al electorado a acudir masivamente a las urnas, y los pronósticos de última hora señalaban una concurrencia de más del 70%.

Cierre preventivo

Israel, entretanto, decretó el cierre de Gaza y Cisjordania en un esfuerzo por evitar fricciones. Se han adoptado medidas especiales para impedir que una manifestación de judíos derechistas prevista para esta tarde en Jerusalén actúe como detonante de las tensiones que se han ido agudizando en la recta final de la campaña electoral. Ayer por la tarde, en Jerusalén, un judío fue herido a pedradas cerca del Muro de las Lamentaciones. Según la radio israelí, la policía destacará en las próximas horas un contingente adicional de 4.000 hombres para prevenir desórdenes en Jerusalén."Hagamos de mañana el Día de Jerusalén", escribía ayer Faisal Husseini en una carta abierta al electorado. Husseini sostiene que una elevada participación reafirmará las reivindicaciones palestinas sobre la ciudad santa.Los primeros en votar fueron muchos de los 20.000 miembros de la policía de Arafat, que hoy montarán guardia en los colegios electorales de Gaza y Cisjordania. Parte de ellos reprimieron la noche del jueves una pequeña manifestación de militantes del marxista Frente Popular para la Liberación de Palestina (FPLP) que salieron a las calles de Ramala exigiendo la libertad de uno de sus dirigentes locales, detenido el jueves; "Mañana habrá democracia y orden", declaró un jefe de la policía palestina.