La UE amenaza a la UEFA con multas si incumple la 'sentencia Bosman'

La UEFA, máximo organismo del fútbol europeo, se ha buscado un mal enemigo. La Comisión Europea le mostró ayer la tarjeta amarilla, advirtiéndole que debe cumplir los principios establecidos a raíz de la sentencia Bosman. A saber, que la desaparición de las cuotas de extranjeros también rige para las competiciones europeas. Si los amos del fútbol continental no doblan la cerviz, se les mostrará la tarjeta roja: serán multados o llevados ante el Tribunal de Luxemburgo.

La Comisión reaccionó ayer con educación formal e irritación de fondo al comunicado emitido el martes por la UEFA en el que ésta manifestaba su propósito de mantener la norma tres más dos en las competiciones europeas, y se negaba a modificarla. Por esa norma los equipos sólo pueden alinear a tres jugadores extranjeros y a dos asimilados, esto es, deportistas que han residido en su país de adopción durante cinco años o que han prestado sus servicios en los juveniles de su actual club.La tesis del ejecutivo comunitario es que el mantenimiento de esa norma choca frontalmente con la sentencia emitida el pasado 15 de diciembre por el Tribunal de Justicia de las Comunidades Europeas -con sede en Luxemburgo- en relación con el caso Bosman. El tribunal dictaminó la ilegalidad de la cuota de extranjeros, en el sentido de que un jugador comunitario no ocupa plaza de extranjero, y por tanto son ilegales las cláusulas que limitan la alineación de jugadores nacionales de otros Estados miembros de la Unión Europea (UE), por entender que eso atenta contra el artículo 48 del Tratado, que consagra la libertad de circulación de los trabajadores.

Los jueces decretaron también la ilegalidad de las indemnizaciones por traspasos, en el litigio que enfrentaba al jugador belga Jean Marc Bosman contra su antiguo club, el Lieja, al que apoyó la UEFA.

Inmediatamente, el comisario de Asuntos Sociales, Pádraig Flynn, estimó que las competiciones a nivel europeo caían "dentro del ámbito de la sentencia". "La cosa está clara y no es negociable", añadió.

Anteayer, su opinión se convirtió también en doctrina oficial de toda la Comisión. Su portavoz, Klaus Van der Pas, anunció ayer que el ejecutivo comunitario enviará inmediatamente a la UEFA una carta en la que le conminará a aplicar la jurisprudencia del tribunal, "porque nadie está por encima de la ley" y "'todos deben ajustarse a las sentencias del tribunal". La carta concluirá con la reserva expresa, de ejercer "actuaciones complementarias, si es necesario en el caso de que la patronal europea no se avenga a razones.

Estas actuaciones pueden ir desde la imposición de multas hasta el encausamiento de la UEFA ante el propio Tribunal de Luxemburgo, precisaron otros portavoces de la Comisión, unánimes en la opinión de que la organización futbolística "está actuando ilegalmente". La Comisión ha tomado cartas en el asunto, puesto que aunque no ha sido muy beligerante en el caso Bosman, le corresponde el papel de "guardiana de los Tratados", según explican los textos fundacionales.

El argumento de que la UEFA abarca a Estados no pertenecientes a la UE, utilizado para eludir la competencia del Tribunal de Luxemburgo es irrelevante, según fuentes comunitarias, porque en todo caso dicha competencia sería aplicable al menos a los equipos nacionales de los Quince.