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Fraga insiste en vincular a los nacionalistas gallegos con la violencia callejera

Xosé Hermida

Manuel Fraga se mantiene en sus trece. El presidente de la Xunta de Galicia reiteró ayer sus ataques a los grupos nacionalistas gallegos, a los que la pasada semana había acusado de connivencia con el terrorismo y la violencia callejera. Fraga dijo que se sentía en la obligación de advertir a los ciudadanos que no desea en Galicia una situación social como la del País Vasco, donde "se empieza por quemar autobuses" y luego "se matan policías por la espalda". La comisión permanente del Bloque Nacionalista Galego (BNG) decidió anoche proponer hoy a su Consejo Nacional la actuación legal contra Fraga.Ni la indignada reacción de los grupos nacionalistas ni siquiera las declaraciones del gobernador civil de La Coruña, Carlos Vacas, quien el pasado martes afirmó, en contra de la opinión de Fraga, que no hay pruebas de la existencia en Galicia de grupos de "guerrilla urbana", hicieron desistir al presidente de sus acusaciones. "Habría que preguntarse si se hacen bastantes investigaciones policiales", señaló Fraga en respuesta al gobernador.

El presidente gallego criticó la actuación de las fuerzas de seguridad la pasada semana durante el intento de asalto de un grupo de mejilloneros a la sede de la Xunta. Según Fraga, la policía aceptó "la presión de los manifestantes violentos" para poner en libertad a dos de sus compañeros que habían sido detenidos.

El jefe del ejecutivo volvió a referirse a los incidentes protagonizados en los últimos meses por distintos colectivos laborales, como pescadores de la comarca de O Morrazo (Pontevedra). "Los derechos legítimos de reunión y manifestación no cubren los cortes de carretera con eucaliptos ardiendo; las acciones de encapuchados que ocupan barcos de servicio público o los ataques con bengalas de unos trabajadores, a otros", comentó Fraga, antes de establecer un paralelismo entre este tipo de acciones y las protagonizadas por grupos radicales como Jarrai: "Se empieza como en el País Vasco, quemando autobuses, tirando piedras contra las farolas, etcétera, y después uno de esos chicos mata el otro día por la espalda a dos ertzainas".

Según Fraga, los responsables de que "el debate político haya subido de tono en Galicia" no son ni el PP ni el PSOE, sino los que "llaman fascista el presidente del Parlamento", en alusión al BNG.

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Sobre la firma

Xosé Hermida
Es corresponsal parlamentario de EL PAÍS. Anteriormente ejerció como redactor jefe de España y delegado en Brasil y Galicia. Ha pasado también por las secciones de Deportes, Reportajes y El País Semanal. Sus primeros trabajos fueron en el diario El Correo Gallego y en la emisora Radio Galega.

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