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Entrevista:LUZ DE GAS

"Los políticos son patológicamente infieles"

Vino de Arévalo (Ávila) y lleva 53 años de palabra leída en novelas y ensayos históricos escuchada en escenarios teatrales y antenas de radio y televisión, y de palabra escrita en toda la prensa y en aquel, su Pueblo de leyenda, diario que echó a rodar por España y el mundo a Hermida, Cebrián, Jesús de la Serna, Carrascal, Tico Medina, Raúl del Pozo, Antonio D. Olano, José María García, Javier M. Reverte, Cándido...Pregunta. ¿Por qué acabó la guerra fría y no la de los sexos?

Respuesta. La primera fue temporal y acabó con el comunismo; la de los sexos viene de Adán y Eva y nunca acabará.

P. ¿Hubiese aceptado ser ministro de Franco?

R. No tuve el ofrecimiento.

P. ¿Le pregunto algo sobre Adolfo Suárez?

R. Sí.

P. ¿Quién fue?

R. Una exhibición escénica importante históricamente valioso.

P. ¿Le pidió algo a Suárez?

R. Que me dejara tranquilo.

P. ¿Por qué los políticos mienten como si fornicaran con su amante?

R. Porque son patológicamente infieles.

P. ¿Qué es el periodismo?

R. Es una expresión y una opinión de la noticia.

P. ¿Cómo usted no ha aborrecido esta profesión?

R. Conecté con ella en lo principal.

P. ¿Qué es lo principal?

R. El oficio y ser testigo de la historia.

P. ¿Lloró por Franco?

R. No tengo tradición de llorar, sino de reír y meditar.

P. Un día encontré a Felipe González leyendo Crónica de una muerte anunciada, de G. Márquez. ¿Llegó usted a topar a Franco leyendo un libro?

R. Mi comunicación con Franco fue de audiencia, y nos oíamos en común.

P. ¿Le falta más Franco o Suárez?

R. El pasado lo tengo como cultura, lo que me importa es el futuro.

P. ¿Quién mató a Dios?

R. Los asesinos de Dios, sin resultados, son eternos.

P. ¿Qué es el bien?

R. Una interpretación de los interesados.

P. ¿Quién mató a Carrero Blanco?

R. Es noticia histórica muy clara.

P. Hábleme de una mujer, sin decir su nombre...

R. De la propia, porque me ha soportado durante medio siglo.

P. ¿Qué le ata a Arévalo?

R. Mi nacimiento, el orgullo y la gratitud.

P. ¿Qué hombre, hoy, atrae más a las mujeres?

R. Quien entretiene más tiempo por su conversación.

P. ¿Está hablando de usted?

R. No, pero soy conversador.

P. ¿Le sirve de algo pensar que puede rezar?

R. Ejerzo mis creencias sin liturgias.

P. ¿Qué piensa en este instante?

R. Yo soy un escéptico y no tengo devociones utópicas.

P. ¿Qué ama?

R. La imaginación.

P. ¿Cómo goza?

R. Tengo alguna decadencia en el gozo.

P. ¿Qué le da miedo?

R. La inestabilidad en lo estable.

P. ¿Por qué sigue escribiendo de política como si nada?

R. Porque soy un testigo de este siglo y mi oficio es escribir para vivir.

P. El otro día oí: "España es fútbol, toros y fulerismo andaluz". ¿Aprueba?

R. Sí, porque España es un arte hasta en sus guerras civiles.

P. ¿En España existe algo más que la España negra?

R. Hemos inventado recientemente la España rosa.

P. ¿Está triste?

R. Combato la tristeza con la fabricación de la ilusión.

P. ¿Le gustaría vivir muchos años amando?

R. Tendría que definir lo que es el amor en la longevidad.

P. ¿Le gustaría morir procreando?

R. Me gustaría vivir haciendo lo propio.

P. A veces digo: "alabado sea E. Romero", pero sin saber por qué.

R. Porque soy un superviviente de la República, de la guerra civil, de Franco y de la democracia.

P. ¿Le ofreció algo González?

R. Con Felipe sólo hablé una vez en las nubes.

P. Se sabe que Franco lo respetaba. ¿Usted a él también?

R. Se lo agradecía por la conjura de sus ministros.

P. ¿Merece una lágrima el régimen actual?

R. Sólo una preocupación.

P. ¿Se ha drogado?

R. Sólo con el pensamiento de los filósofos.

P. Señor Premio Nacional de Literatura y fundador de la Facultad de Información y único ganador de los premios Planeta, Espejo de España y Ateneo de Sevilla, ¿me hace una pregunta?

R. ¿Le he complacido o le he preocupado?

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