ETA siembra de bombas un centro comercial en Valencia

ETA sembró de bombas El Corte Inglés de la calle del Pintor Sorolla de Valencia en plena campaña de Navidad y mientras se clausuraba la cumbre de jefes de Estado y de Gobierno de la Unión Europea en Madrid. Josefina Corresa Huerta, de 43 años, falleció ayer, a las 15.02, al estallar una bomba en el lavabo de señoras de la cafetería, en la sexta planta. Su hija Amparo Rodrigo, de 15 años, resultó herida muy grave, mientras otras ocho personas sufrieron lesiones de menor consideración. Instantes después se activó otro explosivo en la cuarta planta, que no causó víctimas, ya que falló el mecanismo de ignición. Pese a que tres artefactos incendiarios de escasa potencia habían ardido 20 minutos antes en los lavabos de mujeres de las plantas segunda y cuarta y del aparcamiento, nadie ordenó el desalojo del centro. En lo que va de año, ETA ha asesinado a 14 personas; seis de ellas, el pasado lunes, en el barrio madrileño de Vallecas.

Hace sólo cuatro días que KAS difundió un comunicado lamentando los "daños a civiles" causados por el atentado perpetrado el pasado lunes en Madrid. En los carteles de la organización que da apoyo a los terroristas podía leerse que "los civiles no han sido ni serán objetivos de ETA".ETA, mediante un atentado indiscriminado, elevó ayer a 14 el número de víctimas mortales en lo que va de año. Los terroristas intentaron una nueva matanza en el momento de mayor ocupación de la cafetería del centro comercial: la hora de la comida y un sábado víspera de las fiestas navideñas. Todo al estilo del atentado de Hipercor de Barcelona, en 1987, que costó la vida a 21 personas.

Una mujer llamó a las 13.40 horas en nombre de ETA a la Cadena SER en Vitoria y a Radio Egin y anunció la colocación de una bomba en El Corte Inglés de Valencia, sin especificar en cuál de los cuatro existentes en la ciudad (tres con la denominación El Corte Inglés y un Hipercor).

A pesar de este aviso, los centros, no fueron desalojados hasta después de la explosión. El comité de empresa y muchos clientes criticaron con dureza el hecho de no haber sido advertidos.

Todas las víctimas se encontraban en la zona de la cafetería en el momento de la explosión. La fallecida, Josefina Corresa, era auxiliar de clínica en la Unidad de Cuidados Intensivos del hospital de Sagunto (Valencia). Era madre de dos chicas, de 15 y 9 años, y había acudido con la mayor de ellas, Amparo Rodrigo, para hacer unas compras navideñas. La muchacha sufre traumatismo múltiple, fractura de tobillo izquierdo, heridas en cara y miembros y contusión torácica.

Hortensia Merlo González, de 32 años, sufrió heridas graves, pero anoche se encontraba en situación estable. Juan Soriano Álvarez, de 40 años; Ana María Carborten, de 34; y la hija de ésta, Ana DoIz, de 12, padecen heridas leves. Melanie Hyde, una norteamericana de 31 años; María Amparo Martínez, de 36; y su hija María Moya Martínez, de 12, fueron dadas de alta poco después.

Clientes y empleados expresaron su malestar por no haber sido avisados. La amenaza telefónica se produjo casi una hora y media antes de la explosión que causó la muerte a Josefina Corresa. Unos veinte minutos antes se registró otro indicio de que el asunto iba en serio: dos papeleras ardieron en la segunda y cuarta planta, al activarse sendas cargas incendiarias.

Tres minutos después de que se produjera la mortal explosión en la cafetería de la sexta planta, se pudo producir una desgracia similar en la cuarta planta, donde un artefacto con 500 gramos de amosal se activó, pero no llegó a estallar. Guardias de seguridad de El Corte Inglés echaron agua sobre el artefacto convencidos de que se trataba de otra bengala similar a las que se habían activado en la segunda y cuarta planta y, posteriormente, en unos lavabos del aparcamiento.

El ministro de Justicia e Interior, Juan Alberto Belloch, tras visitar el centro comercial, pidió que no se polemice sobre la responsabilidad de los hechos. "La única responsabilidad es de los asesinos. Lo contrario es hacer un favor a los terroristas", dijo Belloch, que añadió: "La rabia hay que contenerla. Pero no vamos a perdonar ni olvidar. Vamos a utilizar todos los medios, que son muchos y poderosos, para detener a los asesinos, cualquiera que sea el precio que nos cueste".

"Repugnante y estúpido"

Belloch calificó de "repugnante y estúpido" que ETA esté intentado "obligar al Estado a negociar" mediante esta campaña de terror. Según el ministro, esta organización "ha decidido que sus enemigos no son el Estado, las instituciones y las personas que lo representan, sino que sus enemigos son todos y cada uno de los ciudadanos de este país".Después de la explosión, el desalojo se efectuó de acuerdo con el, plan de evacuación. El comité de empresa criticó que nadie avisara entre los primeros pequeños incendios y el estallido de la bomba. Pero horas después, el vicepresidente del comité, José Luis Valentín, negó que hubiese criticado la falta de aviso de desalojo. "Yo me refería a que a mí no me habían podido avisar porque estaba comiendo", matizó.

Uno de los incidentes más confusos se produjo minutos antes de la mortal explosión, cuando ya se habían registrado los tres pequeños incendios. Médicos del SAMU (Servicio de Asistencia Médica Urgente) acudieron al lugar, pero los servicios de seguridad del centro les indicaron, según algunos testigos, que. había sido una falsa alarma, con referencia a los fuegos de escasa consideración. Muy poco después estalló la bomba.

El juez de guardia, Fernando de Rosa, indicó que se está investigando qué pasó entre el momento en que se recibió el aviso de bomba y la dramática explosión. A las ocho de la tarde se autorizó a los clientes a retirar sus vehículos del aparcamiento. Se organizaron grupos de 10 personas para acceder a los sótanos.

Belloch, que se desplazó a Valencia poco después de conocerse los hechos, anunció que estará presente en los funerales de la víctima. El ministro estuvo acompañado por el titular de Administraciones Públicas, Joan Lerma, y la delegada del Gobierno en Valencia, Carmen Moya.

El presidente de la Generalitat, Eduardo Zaplana, estaba fuera de Valencia, pero regresó poco antes de medianoche. Apeló a "defender la democracia frente a la violencia de los terroristas" y ha convocado una reunión de su Gobierno para hoy. La alcaldesa, Rita Barberá, ha llamado a los valencianos a un paro de cinco minutos mañana, lunes, a las 12.00. Todos los partidos, sindicatos y organizaciones empresariales condenaron la reaparición de ETA en la Comunidad Valenciana, donde ha cometido numerosos atentados. Belloch relacionó los cinco artefactos de amosal, utilizados ayer por ETA con otros descubiertos el pasado verano en Sagunto. El ministro explicó que las fuerzas de seguridad llevan meses reorientando su actividad hacia este tipo de atentados indiscriminados de ETA y aseguró que continuará con las gestiones para convocar una nueva reunión del Pacto de Madrid.